El destino siempre se ensaña con la celeste. En la Copa América de 2011 Diego Godín contrajo un virus y en la segunda fecha Edinson Cavani se lesionó una rodilla. La previa del Mundial de 2014 estuvo rodeada por la intervención quirúrgica a la que fue sometido Luis Suárez en la rodilla. El país estuvo en vilo a lo largo de todo el proceso de recuperación y celebró el milagro cuando le metió los dos goles a los ingleses. En 2015 se bajó Martín Cáceres de la Copa América de Chile por una fractura. Otra lesión de rodilla dejó afuera a Suárez de la Copa América Centenario en Estados Unidos, en 2016. Rusia 2018 estuvo signado por la lesión del indestructible Cavani ante Portugal, lo que le impidió ser de la partida ante Francia.
Bajo estas circunstancias es de suponer que, por estas horas, el cuerpo técnico de Uruguay se sienta frente al televisor con un único deseo: que el combate no cobre victimas de su bando.
A falta de tres meses para el inicio de la Copa América solo los entrenadores reparan en determinados detalles. Minutos jugados por sus dirigidos, la acumulación de los mismos a lo largo de la temporada, lesiones y evoluciones. Y, por sobre todas las cosas, el desgaste.
Es una tarea conjunta. Comprende a todos. Desde el médico que les pincha el dedo para conocer los niveles de desgaste y de ese modo advertir sobre determinadas lesiones. El preparador físico que se encuentra con jugadores desgastados por una larga temporada en el continente europeo. Y el técnico que recibe los informes para luego decidir la oncena que mandará a la cancha.
Uruguay siempre es un rival respetable en la Copa América. Su historia dice que es la selección que más veces levantó el trofeo y que es especialista en arruinarle la fiesta a los locales.
Las potencias lo miran con respeto al pequeño país. Esta Copa es una de las últimas oportunidades para una generación que ya se consagró en 2011. Y saber cómo llegarán los tres o cuatro pilares que tiene el equipo desvela a propios y extraños.
Por lo pronto, la medida la van dando la finalización de los campeonatos, el desgaste y las lesiones o dolencias de los jugadores.
A nadie escapa que Uruguay tiene tres pilares en su equipo que son el capitán Godín y los dos hombres de la ofensiva: Suárez y Cavani.
Por lo pronto, la eliminación de Paris Saint Germain y Atlético de Madrid de la Liga de Campeones, supone un problema menos para la selección. Nadie deseaba que quedaran eliminados, pero es un dato de la realidad.
Cavani, Godín y José María Giménez -tras una temporada de varias lesiones musculares- estarán antes de lo previsto a la orden del cuerpo técnico de la celeste.
El torneo que cierra la actividad en Europa es la Liga de Campeones. La final está fijada para el 1º de junio en el Estadio Wanda Metropolitano de Madrid.
Los únicos clubes que siguen en carrera son Barcelona donde milita Suárez y Juventus de Rodrigo Bentancur y Cáceres.
Los citados jugadores tendrán más tiempo de recuperación del que pensaban.
En Francia, donde milita Cavani -que se recupera de una lesión-, la Ligue 1 finaliza el 25 de mayo. A diferencia de su compañero de ofensiva, Suárez, el Matador ya no juega la Copa de Francia porque su equipo quedó eliminado.
A esto se suma que Cavani tuvo menos actividad de la prevista en los últimos tiempos debido a una lesión que es la que lo margina de formar parte de la delegación de Uruguay que jugará la China Cup.
Godín y Giménez, sumado a otros jugadores del plantel que militan en la liga española, terminan la actividad el 19 de mayo, una semana antes del Apertura en Uruguay.
Atlético de Madrid tampoco jugará la final de la Copa del Rey.
Ahora el gran dilema pasa a ser Suárez que juega todas las competencias que andan en la vuelta. Su equipo Barcelona está puntero en la liga.
Sigue en carrera por la Liga de Campeones y clasificó para la final de la Copa del Rey fijada para el 25 de mayo, en Sevilla, contra Valencia.
El cuerpo técnico de Uruguay resolvió que la preparación para la Copa América se iniciará el 20 de mayo con los jugadores que estén disponibles.
El 13 de junio viajan a Belo Horizonte para el torneo que se inicia el 14 de junio y finalizará el 7 de julio.
El último jugador en integrarse será Suárez que tiene la final de la Copa del Rey y se debe esperar si clasifica o no a la final de la Champions.
Esto indica que el cuerpo técnico podría disponer del plantel completo luego del 3 de junio.
De todos modos, Tabárez corre con algunas ventajas con relación al resto de los entrenadores y es el tiempo de trabajo y conocimiento que tiene con sus futbolistas.
El cuerpo técnico aprovechará la China Cup para mantener charlas con los jugadores y planificar la futura actividad.
En pocos días la selección uruguaya viajará a Asia para disputar la China Cup. El torneo forma de la preparación porque el cuerpo técnico analizará determinadas situaciones de funcionamientos individuales y colectivo.
El viernes se va el cuerpo técnico junto con el jugador Giovanni González de Peñarol. Llegan a China el domingo de noche. Debutan el viernes 22 con Uzbekistán y el lunes 25 se miden con China o Tailandia. Regresan a Montevideo el 29 de marzo.
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