Los cuestionamientos que el presidente de Nacional, José Decurnex, hizo a los arbitrajes tras el recordado partido ante Fénix en Capurro por el Torneo Apertura siguen dando que hablar y el caso continúa en los escritorios de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF).
El Tribunal de Ética de la AUF determinó que el titular albo era responsable de haber incurrido en manifestaciones injuriosas contra los árbitros y decidió aplicarle una observación.
Sin embargo, el caso sigue, porque ese Tribunal entiende que los dichos implican la violación del artículo 9.17 del Código Disciplinario, por lo que derivó el asunto a la Comisión Disciplinaria de la AUF que ya instruyó expediente al respecto.
Juan Pablo Decia, uno de los integrantes de la Comisión Disciplinaria explicó a Referí cómo sigue el caso. “Las manifestaciones de Decurnex en relación a los árbitros implican la violación del artículo 9.17 del Código Disciplinario que acarrea la responsabilidad del club cuando los dirigentes realizan manifestaciones de esa índole que están prohibidas en el código”.
Agregó que la remisión de la denuncia y los antecedentes del Tribunal de Ética a la Comisión Disciplinaria es por la violación a una norma objetiva que prohíbe a los presidentes y vices comentar fallos de los árbitros. “No hay ninguna referencia a la existencia de injurias contra los árbitros. La denuncia solo radica en la presión que realizó el presidente hacia los árbitros comentando los fallos arbitrales”, aclaró.
En dicha comisión entienden que las críticas de dirigentes a los jueces son habituales y que por eso no son denunciadas, pero ahora se encuentran ante una denuncia por primera vez, lo que generará un antes y un después en la jurisprudencia.
“Esto es recurrente, el tema es que nunca se denuncia –señaló Decía–. Y el Tribunal por criterio no actúa de oficio y ahora es la primera vez que tenemos una denuncia de un organismo de la AUF, a través de la denuncia que presentó la Gremial de Árbitros, que da cuenta de la existencia de un hecho de esta naturaleza”.
El jurista explicó que al ser algo habitual en el fútbol, por una cuestión de política sancionatoria la Comisión Disciplinaria había resuelto no intervenir de oficio ante estas situaciones. “Ahora, si viene una denuncia, no queda otra para la Comisión que instruir el expediente y fallar”, señaló.
Tras la instrucción del expediente, Nacional tienen un plazo para contestar de cuatro días, después se irá a audiencia y se resolverá. Si llega a haber una sanción o castigo, no recaerá sobre Decurnex, quien de alguna manera ya fue sancionado por el Tribunal de Ética, pero sí sobre el club.
Las sanciones van desde una amonestación al cierre de cancha, aunque Decia entiende que no se espera un castigo de esa naturaleza. “El tema es que genera una antecedente para el club y, en función de la progresividad de la sanción, si el día de mañana hay alguna cuestión vinculada con la responsabilidad objetiva, se considerará que el club sea reincidente en la medida en que se genere la infracción dentro de los plazos que establecen las normas”, indicó.
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