El cuarteto del amor y sus serenatas solidarias

"Hemos hecho serenatas de cumpleaños y de casamiento, de declaración, pedidos de matrimonio y reconciliaciones; hasta un divorcio, en el que la pareja bailó su última canción con El cuarteto del amor", cuenta a El Observador Andrés Lazaroff, líder del conjunto y único hijo del músico y compositor Jorge "Choncho" Lazaroff.

El cuarteto, es un conjunto callejero que regala canciones de amor con un repertorio irresistible de rumbitas swing, algún bolero, foxtrot, típica y ranchera. ¿Los instrumentos? Guitarra, mandolina y violín.

Para que El cuarteto aparezca no necesariamente tiene que ser invitado. Sus presentaciones espontáneas en el Registro Civil o centros educativos le han hecho ganar popularidad entre los románticos y curiosos.

"Este año tocamos en escuelas y liceos. Por la vuelta a clases fuimos llamados por maestros y padres de distintas instituciones", relata. Lazaroff fundó El cuarteto del amor en Córdoba, Argentina, en 2011.

Estaba haciendo realidad, literalmente, un sueño. "A la idea la soñé en serio, durmiendo. Está hecho para la gente, el universo te manda al lugar que querés estar", dice.

Su primera aparición fue en la esquina de 25 de Mayo y Rivadavia, en la ciudad de Córdoba. Un año después Lazaroff viajó a Uruguay: "Me enamoro de una chiquilina y traigo la idea".

Serenata solidaria

En su página de Facebook, el conjunto invita a los usuarios a contactarse con ellos si están pasando por un mal momento o conocen a alguien que necesite una serenata para "hacer un corte con esa realidad jodida".

"El Cuarteto del Amor le va a cantar y a transformarle el ánimo, de forma totalmente honoraria", dicen en el mensaje que acompaña su número de contacto.

"Tenemos llamadas increíbles. Una vez despedimos a una persona que moría, fue una situación emocionante. También dimos la bienvenida a un bebe durante su nacimiento", comentó Lazaroff.

El grupo busca empatizar con el otro. Según el cantante, la gente es muy agradecida, "te dicen: ¡gracias, me cambiaste la vida!, y eso es lo más grande que hay".

Salvo en cumpleaños, casamientos o fiestas, El cuarteto del amor no cobra por tocar serenatas. Ofrecen su repertorio de canciones "para los más pobres y los más ricos". "Cuando vamos a los barrios, hospitales y ferias no nos pagan. Tocamos de forma honoraria, tampoco participamos de actos políticos, ni publicidades. El cuarteto no puede estar vinculado a nada, ya que es de la calle y no de las marcas", afirma Andrés Lazaroff.

La serenata siempre está a la orden, sin importar el día de la semana. "Hacemos entre 5000 y 6000 serenatas por año, un lunes quizás siete u ocho. Ponemos precios populares, para que todo el mundo pueda disfrutar".

El cuarteto rompe con la lógica de que la banda debe estar en el escenario y los espectadores en la tribuna. "No estamos en el escenario, intentamos evitarlo, para llegar a la personas no puede haber nada de por medio. Nos gusta la cercanía y mirar a los ojos para remover a las personas. Queremos enamorar a la sociedad", dice Lazaroff.

Legado familiar

Andrés tenía 3 años cuando su padre, Jorge 'Choncho' Lazaroff, reconocido músico, intérprete y compositor de la música popular uruguaya, falleció con 39 años. Era 1989, pero lo recuerda: "Mi viejo fue un gran músico, un crack, un ideólogo; desde que tengo uso de razón tocaba él el piano y yo la batería, una de esas de niño, chiquita".

"No sólo se destacó en la música, también estaba muy comprometido con los demás", dice Lazaroff. Además, cree que heredó de su padre, la "tenacidad de ir para adelante" y la energía que brinda hacia los demás.