El Mides no tiene refugios en seis departamentos en los que hay personas viviendo en la calle

Son 1660 la cantidad de camas que ofrece el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) en los meses más fríos del año para las personas que viven en la calle.

Esta política se enmarca dentro de la ley fundacional del organismo de marzo de 2005 que, entre otros puntos, estableció como competencia del ministerio la asistencia de las "necesidades básicas de quienes se hallan en situación de indigencia y extrema pobreza".

Sin embargo, hay seis departamentos del país en los que el brazo asistencial del ministerio no logra llegar, al menos, mediante el ofrecimiento de un techo para quienes duermen a la intemperie.

En Artigas, Salto, Paysandú, Treinta y Tres, Florida y Tacuarembó hay personas que viven en la calle pero no hay refugios del ministerio, según un relevamiento hecho por El Observador. De hecho hay solo cuatro departamentos en los que la cartera tiene instalaciones para alojar a los indigentes y la inmensa mayoría de de esas camas están en Montevideo (ver página 3).

Sin embargo, el ministerio sí tiene presencia en todos esos departamentos y, en ocasiones, colabora con acciones puntuales con la comuna.

Cada uno de esos seis departamentos ofrece una situación diferente y no siempre hay coincidencia entre el panorama que maneja el ministerio y las autoridades locales.

En Artigas, por ejemplo, la situación encuentra a la intendencia y al Mides con cifras diferentes con respecto a la cantidad de personas en situación de calle.

El intendente Pablo Caram dijo a El Observador que el número llega a 30 personas. "Los ves dormir en la calle, en la piscina municipal, en la oficina de turismo, en las plazas públicas", afirmó. En este sentido, la directora de Desarrollo Social de la intendencia, Gianna Irache, afirmó que la comuna no tiene refugios porque esa tarea le "corresponde a Mides".

"Nosotros le damos el alimento por unos días. Son muchas las personas que llegan. En la parte que podemos cubrir, la estamos cubriendo, hay otra parte que corresponde a otras instituciones", dijo la jerarca.

Mario Silva, director del Mides para Artigas, dijo a El Observador que la semana pasada se realizó un relevamiento y arrojó que actualmente hay 21 personas en situación de calle y que son todos artiguenses.

"Está bueno haberlo hecho (el relevamiento) así nos dejamos de hablar bolazos, de decir que hay cuarenta", dijo Silva.

Sin embargo, Irache afirmó que basta con ir al departamento para ver que son más que esa cantidad y que varios no son oriundos del departamento.

A estas personas se les ofrece ir a un refugio en Montevideo, pero "todos optan por no ir", dijo Silva.

El representante del Mides en Artigas aseguró que construir un refugio en ese departamento es inviable por falta de recursos. "Tampoco amerita un refugio por 20 personas, con lo que cuesta mantenerlo y teniendo refugios en Montevideo a donde se pueden trasladar. El tema es la negación de las personas que no quieren ir", repitió.

En el caso de Paysandú la diferencia de cifras es aún más alta. Carolina Añasco, directora de Desarrollo Social de la intendencia, dijo a El Observador que en el departamento hay un refugio mantenido de forma interinstitucional.

La intendencia paga el alquiler del local, las cocineras, algunos alimentos secos y algunos insumos como garrafas y camas cuando se necesitan. El Mides, por su parte, paga los alimentos e insumos y los sueldos del equipo multidisciplinario que atiende a las personas a cargo de la Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ).

El local tiene cupo para 40 personas, pero no hay una división según el sexo. Conviven madres con hijos y hombres solos. Carlos Damico, director del Mides en Paysandú, dijo que están trabajando para lograr tener un local dividido como es habitual.

Más allá de estas 40 personas que pernoctan en el refugio, según Añasco hay "de 100 a 150 personas en situación de calle".

"La gente viene cuando arranca la zafra de la naranja y después no se va. Lo mismo pasa con la Semana de la Cerveza", explicó la jerarca y agregó que solo un 30% son sanduceros.

Damico difiere con la cifra que maneja la intendencia. "Cuando mucho son 15 y la mitad van a ir al refugio por el Plan Invierno", afirmó. Además señló que no se encuentran en plazas sino principalmente en los aleros del estadio 8 de junio.

La disparidad de números también llega a Salto, donde funciona un refugio para 20 personas mantenido por la intendencia.

María Soria, directora de Desarrollo Social de la comuna, contó que en sus tres años de gestión solamente han ido cinco salteños al refugio, mientras que el resto de los asistentes son de otros lugares.

Sin embargo, el refugio no alcanza a cubrir las necesidades habitacionales del departamento. Según la jerarca "hay muchísimas más personas (viviendo en la calle) que la capacidad que tiene el refugio, pero jamás han solicitado ir".

Según la estimación de Soria hay "más de 100 personas" en esa condición. La intendencia supone que no concurren al refugio porque sienten que "su casa es el espacio público".

"Muchos de los que viven en plazas limpian los baños públicos luego de usarlos, los barren por ejemplo", dijo Soria.

En tanto, la directora del Mides en el departamento, Marcela Azambuja, dijo el número de personas que duermen en la calle es cercano a diez y agregó que "se resuelve muy rápidamente cada caso".

Consultada sobre si no es una responsabilidad del Mides tener un refugio para darle una solución habitacional a las personas en situación de calle la jerarca respondió: "No sé. No sabría decirte si es una competencia del Mides. En los departamentos se apunta a la corresponsabilidad entre los gobiernos departamentales y nacionales para la optimización de los recursos".

En el departamento de Florida la forma de proteger a los indigentes de las olas de frío también se da bajo el ala de la intendencia.

La comuna floridense gestiona un refugio para 12 hombres y mujeres solos y entrega 500 bonos de alimentación a las personas que asisten a almorzar a alguno de los seis comedores –mantenidos por intendencia y Mides– con el fin de garantizarles un plato de comida en la noche, informó a El Observador Alicia Oriozabala, directora de Desarrollo Social de la comuna .

El bono Cena Caliente es un ticket que recibe una persona en convenio con centros comerciales para canjear por alimentos "permitidos", tales como frutas, verduras, harina, azúcar y otros alimentos básicos. Una persona sola recibe $1850 mensuales y llega a recibir hasta casi $5000 si tienen cuatro hijos o más.

Estos bonos le significan un gasto de dos millones de pesos a la comuna entre los tres meses de invierno.

Dinora Lanz, directora del Mides en Florida, dijo que el Mides asegura una comida diaria con el almuerzo en los comedores y afirmó que los diferentes organismos del estado no deben "pisarse" en las políticas, por lo que si la intendencia tiene el refugio no deben intervenir.

En Treinta y Tres no hay personas durmiendo en la calle, sin embargo, hay 17 personas acampando de forma permanente a la orilla del Río Olimar, y son tratadas como personas en situación de calle por su alta vulnerabilidad.

La semana pasada se decidió que la intendencia financie un refugio transitorio para el invierno ubicado en un gimnasio con capacidad para 80 camas para estas personas en "situación de río o carpa", dijo Elisa Sanguinetti, directora de Desarrollo Social de la intendencia.El Mides será el encargado de proveer las cuatro comidas a las personas que habiten en el refugio.

Asimismo, cuando hay casos puntuales donde una persona se acerca a la intendencia pidiendo asilo la intendencia busca una alternativa.

"Hemos hecho de todo y con creatividad: mediar con familiares, alojarlo en alguna organización de la sociedad civil, alquilarles algo o conseguirle alguna casa, les damos pasaje, los mandamos en camioneta", dijo Sanguinetti y agregó que de todas formas no es su cometido solucionar esos temas.

La jerarca departamental dijo que la intendencia mantiene un programa llamado "Plato Amigo" donde los referentes barriales cocinan durante 90 días un plato de cena caliente para los vecinos en situaciones más vulnerables. Según los números de la jerarca, entre los tres meses se reparten más de 13.000 platos.

En el departamento más grande del país, los casos de personas en situación de calle son escasos: solo ocho o nueve según la comuna y el Mides, que en esta ocasión coinciden.

Pedro Permanyer, director de Desarrollo Social de la intendencia, explicó que cuando una persona se acerca a solicitar un techo la intendencia se encarga de alquilar alguna habitación en alguna pensión como "medida paliativa".

"No es una competencia del gobierno departamental pero tampoco somos de decir esto nos toca o esto no nos toca. No nos lavamos las manos", dijo el jerarca.

El director del Mides en el departamento, Álvaro de Paula, indicó que se trabaja en conjunto con la policía comunitaria, el Ministerio de Salud Pública, ASSE, y la intendencia para tratar cada caso en particular.