La unidad, ese bien tan preciado y cuidado en el Frente Amplio (FA), se ha visto amenazada en más de una oportunidad en los más de 13 años que lleva la izquierda en el gobierno, pero entre algunos dirigentes de la coalición existe "preocupación" por la forma en que las diferencias internas se han acentuado en este tercer período y se dirimen de las puertas para afuera.
La falta de consenso respecto al TLC con
Chile,
tras un Plenario que votó un cuarto intermedio postergando la definición sobre el tema, provocó que el astorismo –por segunda vez en menos de seis meses– expresara la posibilidad de que la izquierda vote dividida y acentuó los resquemores entre algunos sectores del oficialismo.
Tanto que el presidente del
Frente Amplio, Javier Miranda, suspendió el Secretariado Ejecutivo del próximo lunes para, en su lugar, reunirse con cada sector por separado y tratar de "bajar la pelota", según expresaron fuentes de la coalición.
Libertad de acción
El diputado del Nuevo Espacio, Jorge Pozzi, dijo esta semana a Búsqueda que "sería una medida muy sabia" que el FA otorgara "libertad de acción" a sus legisladores y aseguró que su sector "está dispuesto" a votar el acuerdo incluso aunque no obtenga el visto bueno del Plenario.
En diciembre, Pozzi también había afirmado públicamente que su sector no votaría el proyecto de ley que otorgaba una solución a los cincuentones, tal cual venía del Poder Ejecutivo. En ese entonces,
Asamblea Uruguay (también integrante del Frente Líber Seregni) se pronunció en un mismo sentido.
Finalmente, el Frente Amplio acordó una fórmula de consenso y votó sin fisuras internas. Desde el astorismo confían en que –como con ese proyecto– "la sangre no llegue al río" y el FA dé luz verde al tratado.
Sin embargo, desde otros sectores no ven con buenos ojos estas nuevas "amenazas" de romper la unidad. Juan Castillo, secretario general del Partido Comunista (PCU) dijo que "no es sabio" otorgar la libertad de acción porque "desmorona" la unidad, "el concepto que más" le "importa defender" al Frente Amplio.
Interna picada
Durante la Mesa Política de este viernes, el presidente del FA Javier Miranda expresó su preocupación por los dardos cruzados entre los sectores de la fuerza política, y puso especial énfasis en las filtraciones a la prensa de lo discutido en el Secretariado Ejecutivo del pasado lunes.
Según informó El País y confirmó El Observador, durante esa reunión hubo duras acusaciones entre los sectores. Por ejemplo, el delegado comunista Daniel Marsiglia opinó que el canciller Rodolfo Nin Novoa "no está en línea" con el programa del FA. Por otra parte, desde el astorismo se reprochó la actitud de Casa Grande, que gritó "como un gol" la votación del cuarto intermedio.