Hay 450 policías en cuarentena por coronavirus

"Los policías están saliendo con tapabocas, esa es la orden que hemos implementado para que ese trabajo no se vea resentido, hay que tomar recaudos", afirmó en entrevista con Doble Click en Del Sol.

En Uruguay hay casi 24.000 policías ejecutivos. El ministro no precisó cuántos de los 450 que se encuentran en cuarentena dieron positivo en el test de covid-19, pero remarcó que "todos están aislados".

"El ministerio tiene otro frente de lucha muy importante al tener 12.000 personas privadas de libertad que conforman una situación humana de mucho riesgo".

Hasta este lunes no había casos positivos en cárceles, pero hay "gente con sospecha" a la que se le realizó el hisopado.

Según la última información del Ministerio, hay 19 personas que se encuentran en cuarentena preventiva en módulos dispuestos para ese fin, y se espera el resultado de siete hisopados.

Larrañaga afirmó que el Ministerio del Interior trabaja en coordinación con la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) y el comisionado parlamentario, Juan Miguel Petit, implementando formas de prevención para evitar que el virus llegue a los centros penitenciarios.

Entre las medidas adoptadas en el protocolo se limita la visita a un adulto por interno, lo que permite evitar la aglomeración de gente y la propagación del virus. Tanto a la visita como a cualquier persona que ingresa a la cárcel se le toma la temperatura con termómetros infrarrojos; si es mayor o igual a 37,5° no podrá ingresar al establecimiento. Luego debe higienizarse las manos con alcohol en gel.

En cuanto a las personas privadas de libertad, se organizaron cuadrillas de internos encargadas de la higiene de los espacios comunes. Además, a cada interno se le entregó jabón de lavar neutro y abundante cantidad de hipoclorito para la limpieza de la celda. También se fumigan vehículos y espacios comunes.

En este sentido, el comisionado parlamentario para las cárceles, Juan Miguel Petit, entregó un informe a la presidenta de la Asamblea General, Beatriz Argimon, en el que argumenta sobre la necesidad de que el Poder Judicial dicte prisión domiciliaria para los reclusos "de alta vulnerabilidad", como los mayores de 65 años, los que tienen enfermedades crónicas o las mujeres con embarazos en curso, ante la posibilidad de que se registren casos de contagio de coronavirus dentro de las cárceles.

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Mantener espacios cerrados

Larrañaga pide a las intendencias departamentales que "continúen con el esfuerzo" de mantener las playas cerradas y, como sucedió en Rocha, "esté sobre la mesa" la posibilidad de aplicar multas a quienes incumplan la medida. 

"No estoy de acuerdo", respondió al ser consultado sobre la reapertura de las playas luego de Semana Santa. "pediría que las intendencias siguieran con ese esfuerzo que fue muy importante".,

Sobre la situación de Montevideo, en donde varias playas ya no cuentan con la cinta que prohíbe su ingreso, Larrañaga sostuvo que el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, se comunicará con el intendente Cristian Di Candia. "Sino nosotros lo vamos a hacer, vamos a buscar un esfuerzo porque nos parece fundamental que se pueda continuar con este proceso hacia esa nueva normalidad".

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Más tobilleras

El ministro anunció que se aceleró el proceso para la adquisición de tobilleras electrónicas para los casos de violencia de género.

En este sentido, afirmó que se van a adquirir 500 mas que quedarán incorporadas al sistema en el corto plazo. "Se va a a ampliar el software y vamos a pasar de 1.200 a 1.700 y paralelamente vamos a estar licitando la adquisición de 1.000 tobilleras mas", apuntó.

Larrañaga estima que con esas 500 que se van a adquirir estará cubierta la demanda para los próximos meses y para 2021 la cartera contará con las otras 1.000 que se van a licitar. 

Desde que comenzó la emergencia sanitaria el 13 de marzo, los llamados a la línea telefónica 0800 4141 del Instituto Nacional de Mujeres (Inmujeres) aumentaron en forma significativa. En los últimos días se han recibido entre 50 y 80 llamadas diarias, aunque no en todos los casos son víctimas heridas que necesitan asistencia, cuando el promedio era de 40 antes de la emergencia sanitaria.