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La justicia peruana dispuso siete días de detención para el expresidente Pedro Castillo
El juez supremo peruano Juan Carlos Checkley ordenó siete días de detención preliminar contra Pedro Castillo, como parte de la investigación que se le sigue por el presunto delito de rebelión. La decisión fue adoptada luego de una audiencia en la que la fiscalía sustentó la necesidad de la medida para asegurar las indagaciones.
En la audiencia, el fiscal supremo Marco Huamán alegó que la medida era necesaria para realizar pesquisas orientadas aidentificar qué otros funcionarios participaron en el presunto delito de rebelión. También para evitar el riesgo de que el ahora detenido Castillo se fugue a otro país, citando la intención de Pedro Castillo de ir a la Embajada de México al momento de su detención la tarde del miércoles.
El depuesto expresidente participó en la audiencia desde la sede de la Dirección de Operaciones especiales (DIROES) donde se encuentra detenido, acompañado por Aníbal Torres, su ex primer ministro y ahora abogado.
El expresidente, quien fue destituido por el pleno del Poder Legislativo pocas horas después del mensaje a la Nación donde anunció su intento de disolver el Parlamento, permanece detenido en la DIROES, a donde fue trasladado luego de diversas diligencias fiscales en la Prefectura de Lima.
La fiscalía lo procesará por el delito de rebelión, regulado en el artículo 346 del Código Penal, por quebrantar el orden constitucional.
El procurador general del Estado Daniel Soria interpuso una denuncia penal en contra del expresidente por la presunta comisión de los delitos de sedición, abuso de autoridad y grave perturbación de la tranquilidad pública, minutos después de que este fuera destituido de su cargo.
Según el Código Penal Peruano, el delito de rebelión está penado con cárcel, no menor de diez ni mayor de veinte años.
