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La vuelta del rugby: la alegría de volver a ser
Quizás pocas veces el resultado importó tan poco. Sí, claro que todos los jugadores entraron a ganar, y que tras 3 semanas de amistosos, los clubes ya se habían sacado el polvo de cinco meses sin jugar. Pero lo que sobrevoló el sábado en Carrasco Polo durante la victoria 57-15 ante Seminario (y seguramente el resto de los partidos también) fue la alegría de volver a estar en una cancha, disfrutando del rugby, un privilegio mientras gran parte de América sufre el impacto del covid-19.
Hasta la tribuna estuvo durante un buen rato mas concentrada en las novedades del regreso que del partido en sí. Finalmente, como se preveía, no fue un puertas cerradas a rajatabla, por las dificultades de aplicarlo en un deporte amateur y en predios que son de clubes sociales.
Así, el pequeño contingente de público (no más de 50 personas) consistió en jugadores y entrenadores de las otras categorias que jugaron más temprano, algún socio que andaba por el club y se arrimó a la cancha y algún padre que llevó a sus hijos a jugar. Eso sí: la amplia mayoría de tapabocas y con distanciamiento, sea por iniciativa propia o por pedido de un par de funcionarios del club que hicieron rondas durante toda la tarde para controlarlo.
Desde el cantito "somos la banda del tapabocas", hasta los que aseguraban que solo se lo ponían porque era obligatorio, y pasando por los chistes sobre el barbijo, el dístanciamiento, o los saludos sin contacto, la nueva normalidad tuvo mas atención en los primeros minutos que el partido en sí. Fue, inconscientemente, una celebración de vover a ser. De volver a estar.
Lo de la cancha fue anecdótico. Mejor Seminario en el arranque, dominando con el scrum, pero sin argumentos más allá de eso, al punto que sus backs terminaban usando el pie tras 4 o 5 fases ante la imposibilidad de avanzar.
Polo se despertó, usó la defensa para conseguir penales y el maul para lastimar con dos tries. Y luego, cuando se activaron los backs, desnivelaron, para irse al descanso 19-3.
En el segundo tiempo hubo más espacios para que los backs desnivelaran, entre el cansancio del rival y una apuesta al uso del pie que ya era un harakiri. Seminario aguantó lo que pudo pero pagó caro su falta de profundidad en ataque cuando dominó.
Los Teros actuales (Rodrigo Silva, Felipe Etcheverry, Nico Freitas, Juan Ormaechea, Mateo Viñals), y los que estuvieron hasta hace poco (Jerónimo Etcheverry) desnivelaron, y mostraron todo lo que mejora el torneo con ellos en cancha.
La estadística dirá Carrasco Polo 57-Seminario 15, el análisis dirá que los Teros le dan brillo al torneo y suben la vara. Lo verdaderamente importante es poder ver deporte y clubes volviendo a la vida en tiempos de pandemia.
Todos los resultados
Trébol venció de visita a Champagnat 36-25, en un partido que se abrió en el segundo tiempo tras un arranque parejo.
(Gentileza Quico Viola)
Los Cuervos ganó con mucha claridad ante PSG el duelo de Punta Carretas
El campeón Old Christians debutó con goleada 61-5 a Ceibos.
Finalmente, en Maldonado MVCC ganó con claridad a Lobos 38-8.
