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¿Qué va a pasar con el Dique Mauá? Las intenciones de Cosse y del gobierno
A pesar de haber sido declarado Monumento Histórico Nacional y de portar casi 150 años de historia, el Dique Mauá es motivo de disputas entre el gobierno nacional y la Intendencia de Montevideo (IMM), lo que le valió varios proyectos frustrados y la definición por parte de un exministro frenteamplista de ser un "nido de ratas".
La intendenta electa de Montevideo, Carolina Cosse, se reunió con el presidente Luis Lacalle Pou el miércoles, y en ese encuentro le manifestó su interés de que el Poder Ejecutivo siguiera adelante con el concurso de ideas que el gobierno anterior llevó adelante para recuperar el predio. "Le comenté que tenía eso ahí como para seguirlo o tomarlo como base para continuar. La verdad que recuperar eso para la ciudad es realmente importante", afirmó la ingeniera electricista a la salida de la Torre Ejecutiva.
A mediados de 2019, la gestión frenteamplista del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) impulsó un concurso de ideas para transformar el punto icónico de la rambla Sur, que antiguamente fue usado para la reparación de embarcaciones. Se presentaron 51 propuestas, de las cuales cinco se consagraron ganadoras.
"La idea era con esos proyectos buscar gente que se interesara en llevarlo a la práctica", relató el exministro, Guillermo Moncecchi, a El Observador. "No nos dio el tiempo y se lo transferimos al nuevo gobierno, que tiene todas las ideas surgidas de ese concurso, y toda la información relevada sobre la situación arquitectónica, urbanística y jurídica de los predios de un estudio que hizo la Facultad de Arquitectura", explicó el exjerarca, que es un hombre de confianza de la intendenta electa y fue su sucesor al frente de la cartera.
Sin embargo, la actual gestión del MIEM pretende venderlo y con el dinero surgido de la venta poder costear una sede propia. Así lo expresó el ministro Omar Paganini, cuando compareció en la Comisión de Presupuesto de Diputados el 15 de setiembre.
"Este ministerio pretende que lo que se reciba por el producido de todas esas ventas se utilice para tener una oficina porque no tenemos. Hoy estamos funcionando en cuatro edificios distintos; uno es prestado o no prestado, porque se trata del cuarto piso del edificio de Ancap", dijo el jerarca a los diputados.
"Pretendemos tener una sede, pero será una pelea que tendremos que dar en su momento. El Dique Mauá está dentro de lo que se puede enajenar y tenemos entendido que se ha presentado una iniciativa privada. Veremos qué pasa con eso", señaló Paganini.
El artículo 64 del proyecto de ley de Presupuesto remitido por el Poder Ejecutivo al Parlamento en agosto crea un Programa de Racionalización de Uso de Bienes Inmuebles del Estado. El órgano, que funcionará en la órbita de Presidencia, pretende relevar las distintas propiedades en manos del Estado e "identificar aquellas que son prescindibles".
De declararse de tal modo, el Poder Ejecutivo procederá a enajenarlo. Y a ese fin estaría destinado el Dique Mauá.
La alcaldesa electa por el Municipio B, Silvana Pissano –en cuyo territorio a cargo contiene la histórica edificación– acusó de "política de devastación de lo público" y de "hipocresía total" al gobierno, y manifestó que "si quieren hacer caja, que vendan la Casa Presidencial". "El Dique Mauá no se vende, se defiende", afirmó la arquitecta, que es la actual directora de Desarrollo Urbano de la IMM.
Disputas
El uso del predio del Dique Mauá ha sido motivo de rispideces entre autoridades nacionales y departamentales en los últimos años. En 2018 el empresario argentino, Juan Carlos López Mena, presentó una iniciativa para convertir al predio en un puerto de Buquebús.
El anterior ministro de Transporte y Obras Públicas (MTOP), Víctor Rossi, había remitido un proyecto de ley a mediados de 2018 para llevar a cabo la idea. El texto buscaba enajenar dos predios del dique sobre la rambla Sur para permitir la construcción. Tanto el Partido Nacional como el Frente Amplio lo aprobaron en Cámara de Senadores, mientras que los partidos Colorado e Independiente votaron en contra.
No obstante, la propuesta naufragó una vez que fue remitida a la Cámara de Representantes. Desde el Frente Amplio estaban dispuestos a habilitar la "concesión" de los terrenos, pero no así la enajenación. La Mesa Política de la coalición de izquierda determinó entonces que "no estaban dadas las condiciones" para aprobar el proyecto.
Fue en esa época que los vecinos de la zona llegaron a juntar más de 10 mil firmas en oposición a la propuesta gubernamental. En el punto más álgido del debate, el ministro Rossi dijo que el dique está reducido a un "nido de ratas". López Mena afirmó que sin enajenación no habría proyecto. "En Uruguay hacen esfuerzos para ser pobres", declaró en su momento.
A cinco días de asumir el puesto de Rossi, el flamante ministro herrerista, Luis Alberto Heber, manifestó su intención de enviar un proyecto de ley al Parlamento para convertir al Dique Mauá en una terminal de pasajeros de Buquebús y para recibir a los cruceros que llegan a Montevideo. "El puerto de carga no puede tener a los pasajeros de Buquebús ni de los cruceros", argumentó el 6 de marzo en entrevista con FM Diamante.
Sin embargo, Heber cambió de opinión y desde junio la intención es replicar la misma idea en Punta Carretas. Desde la cartera informaron a El Observador que aún "se está trabajando" en el proyecto.
Mientras tanto, el Dique Mauá permanece sin cambios. "El destino que se le dé a este lugar tiene que ser el de un espacio público, en un proceso de construcción con la participación y en función de la gente”, planteó el intendente Christian di Candia a fines del año pasado, al cierre del concurso de ideas promovido por el MIEM.
"Es evidente que vos no podés hacer algo ahí sin trabajar en conjunto con la IMM, porque es una zona muy relevante en la ciudad, si bien es propiedad del MIEM", dijo el exministro Moncecchi a El Observador.
