Hace tres días que el nombre de Luis Suárez es tendencia en las redes sociales con el hashtag #SuárezANacional. Desde que Referí adelantó el jueves 7 de julio que el futbolista estaba sorprendido porque nunca lo habían llamado de Nacional, los hinchas empezaron la campaña.
"Estoy sorprendido porque los dirigentes de Nacional ni siquiera me llamaron para saber mi situación. Porque si llegué a pensar e ilusionarme con la posibilidad de River, lo mismo hubiera pasado con la de Nacional, que fue mi casa", dijo el delantero.
"La gente de River te quiere tanto, te insiste tanto, te llaman constantemente, que uno llega a pensarlo y a planteárselo. Lo mismo pasaría con Nacional si hubiera estado interesado", agregó el Pistolero.
El presidente tricolor reconoció que no se había planteado esa posibilidad porque el delantero había dicho tiempo atrás que prefería seguir jugando en Europa tras quedar libre de Atlético de Madrid, el 30 de junio.
De manera que le mandó un mensaje a Suárez que reside en España y entrena en su casa mientras define su futuro. El martes Fuentes y Suárez mantuvieron una conversación telefónica, y el dirigente albo manifestó: “Tuve una charla muy linda, muy afectuosa y cordial. En esa charla Luis ratificó su amor incondicional con Nacional, eso está clarísimo. Hablamos de todo, él no cerró ninguna posibilidad”, dijo Fuentes en Sport 890.
La semana pasada Suárez confirmó a Referí que tenía propuestas de España, Italia e Inglaterra. Unirse cuanto antes a un plantel es vital para el futbolista, cuyo objetivo es llegar en forma al Mundial de Qatar entre el 21 de noviembre y 18 de diciembre próximos.
Después de debutar en Nacional, en la Copa Libertadores de 2005, Suárez disputó 34 partidos y marcó 12 goles con los tricolores. En junio de 2006, tras disputar los últimos dos partidos en la Liguilla, fue transferido al Groningen de Holanda.
Lleva 16 años en Europa, donde formó su familia y llevó adelante una carrera fantástica al más alto nivel. Después de Holanda fue figura en la Premier League y en la liga española. En el último tramo de su trayectoria y a solo cuatro meses de la que será su última Copa del Mundo, el goleador prefiere mantener el nivel.
De todas formas, el regreso en este momento a Nacional tiene aristas positivas, que el futbolista debe estar evaluando junto a su familia y allegados.
Dejando de lado el tema económico, ya que es imposible que Nacional pueda siquiera acercarse a sus pretensiones, la repatriada tiene otros aspectos interesantes.
Nacional está en carrera en la Copa Sudamericana y los partidos de cuartos de final frente a Atlético Goianiense de Brasil se jugarán el 2 y el 9 de agosto, fecha en las que comienzan las principales ligas europeas. Suárez ya dejó atrás sus vacaciones y entrena a diario, por lo que se supone que físicamente estará en óptimas condiciones en un mes.
Los partidos internacionales que el equipo que dirige Pablo Repetto tiene por delante pueden ser dos, cuatro o cinco, si llega a la final de la Sudamericana prevista para el sábado 1° de octubre en Córdoba, Argentina.
Además, Nacional tiene los 15 partidos del Torneo Clausura y las posibles finales.
A fines de setiembre la selección uruguaya jugará dos partidos de preparación para el Mundial: el 22 frente a Irán y el 27 contra Canadá, en Viena.
Como mínimo Suárez tendría 17 partidos con la camiseta tricolor para mantener su forma futbolística, tal vez no en el nivel tan alto que está acostumbrado, pero a la altura de su carrera, no debería ser ese un obstáculo para rendir al máximo en la Copa del Mundo.
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