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Los árbitros uruguayos comenzaron su odisea para dirigir en Libertadores
Con tapabocas y máscaras de acrílico que cubren el rostros, los jueces uruguayos Gustavo Tejera, Martín Soppi y Carlos Barreiro llegaron a Asunción el pasado lunes e iniciaron una estadía de dos meses en Paraguay, donde arbitrarán partidos de Copa Libertadores, que ahí se disputen, en la vuelta del principal torneo continental tras el receso por el coronavirus.
Además de ellos, otros cuatro jueces, Leodán González, Esteban Ostojich, Nicolás Tarán y Richard Trinidad, irán la semana próxima a Brasil, uno de los países más afectados por el virus en el continente, para dirigir encuentros de la Copa que se jueguen en sus ciudades.
De esta forma, los árbitros comenzaron la avanzada en el regreso de la Libertadores, que tiene en carrera a Nacional y a Peñarol, los que cuando oficien de local en Montevideo serán dirigidos por jueces paraguayos, que fueron elegidos para cubrir los encuentros en Montevideo.
Conmebol eligió para los árbitros un sistema distinto que para los clubes, a los que les paga los vuelos chárter, decidió que estos se trasladen y se instalen en países designados por proximidad geográfica.
“Con la finalidad de evitar viajes largos, los árbitros serán de países limítrofes -donde se harán las pruebas laboratoriales antes de partir- y se desplazarán hasta las sedes por vía aérea o terrestre, según las condiciones”, indicó la Conmebol.
Los jueces permanecerán en ese territorio mientras dure la fase de grupos del torneo, indicó la Confederación.
De esa forma, los árbitros estarán dos meses fuera de su país, lejos de sus familias, hasta fines de octubre, el día 22 de ese mes, cuando terminen las instancias de fase de grupos.
“El funcionamiento es bien fácil. Se quedan en ese país hasta que retornan a fines de octubre”, explicó a Referí el director del Departamento de Arbitraje de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Darío Ubriaco.
La Conmebol también determinó que para los jueces no aplicará la "burbuja", el regimen especial que regirá para los clubes, que viajarán en una especie de corredor sanitario y tendrán el menor contacto con el país extranjero. Llegarán en vuelos chárter, utilizarán hoteles alejados de la ciudad y solo saldrán a jugar el partido. Al regreso a cada país, quedarán aislados en las concentraciones de los clubes. En el caso de Uruguay, los planteles de Nacional y Peñarol no podrán entrar ni salir de Los Céspedes y Los Aromos, durante una semana, y cualquier violación de ese protocolo será suficiente para que el gobierno suspenda los partidos de la Libertadores en el país.
En el caso de los árbitros, que se instalan en un país, Tejera, juez central, y los asistentes Soppi y Barreiro, realizan en Asunción una cuarentena de 14 días, cada uno en su respectiva habitación del hotel, tal como se dispone para todos los que lleguen al país guaraní.
Una vez concluida la cuarentena, estarán a la espera de las designaciones para los distintos partidos que se diputen en ese territorio.
Lo mismo ocurrirá Leodán González y Ostojich, y los asistentes Tarán y Trinidad, quienes viajarán el 11 de setiembre. En principio, se instalarían en San Pablo para dirigir los partidos que ahí se jueguen, pero también podrían ir a otras ciudades.
Además de los cuatro uruguayos, la Conmebol designó a nueves jueces argentinos para los partidos en Brasil, donde deben disputarse 14 juegos para completar la fase de grupo.
A la hora de desplazarse, los jueces deben respetar los protocolos de Conmebol para los actores del fútbol, como utilizar tapabocas y otros controles de higiene.
Será el Departamento de Árbitros de Conmebol el responsable de garantizar que se apliquen y respeten las normas de higiene.
En tanto, los jueces que le arbitrarán a Nacional y Peñarol serán paraguayos: Juan Benítez y José Méndez, con los asistentes Milciades Saldivar y Eduardo Cardozo. Cuando lleguen al país, deberán cumplir con las medidas sanitarias que el gobierno estableció para los extranjeros, ingresar con un resultado negativo de covid-19, siete días de cuarentena y someterse a otro hisopado, al séptimo día, con resultado negativo para poder volver a la vida normal.
A los tricolores les resta jugar en Montevideo ante Racing de Avellaneda y Alianza Lima, mientras que los carboneros deben recibir a Atlético Paranaense y a Colo Colo.
Cuando viajen a Argentina, para jugar ante Racing, a los albos le podrá tocar jueces brasileños o chilenos, mientras que cuando visiten a Estudiantes de Mérida en Venzuela serán dirigidos por colombianos o brasileños.
En tanto, cuando Peñarol viaje a Chile para enfrentar a Colo Colo será dirigido por jueces argentinos, al igual que cuando visite a Paranaense. (Vea todos los árbitros designados por Conmebol)
Los problemas que Conmebol le deja al Campeonato Uruguayo
El fútbol uruguayo, que tras la vuelta luego del parate por el coronavirus tiene una agenda cargada con partidos los fines de semana y entre semana, más los de la Segunda división, sentirá la baja por la salida de los siete jueces que dirigirán por la Libertadores, a los que en estos días se les suma Andrés Cunha, quien fue a impartir justicia en el fútbol de Arabia Saudita.
En ese sentido, habrá ocho árbitros menos a la hora de designar los jueces para los partidos del Apertura y la Segunda división.
“Va a afectar, son siete personas menos, más Cunha que está en Arabia”, dijo Ubriaco a Referí.
“En la medida que la Segunda división no se juegue los fines de semana junto a la Primera división, se puede cubrir la cantidad de partidos. Si se juntaran el fin de semana, sería más complicado”, agregó. “De todas maneras, eso influye y afecta porque son menos cantidad de personas y con tantos partidos todos los días”.
Por el momento, la Conmebol solo dio los detalles para la Copa Libertadores, que se reiniciará el 15 de setiembre, mientras aún no dio indicaciones para la Copa Sudamericana, cuya fecha programada de regreso es el 27 de octubre y en la que están en carrera Plaza Colonia, River Plate, Fénix y Liverpool.
Si bien faltan casi dos meses para esa fecha, estiman que Conmebol repetirá ese mismo formato con los jueces en su segundo torneo de clubes, aunque habrá que esperar cómo sigue la situación del covid-19 en la región.
