El partido político del
brexit vive su enésima crisis tras la consecución del brexit, con el llamado de su líder Nigel Farage a la expulsión del único diputado del partido por no haberle conseguido el título de sir.
A pesar de los 3,8 millones de votos conseguidos en las últimas elecciones generales de mayo de 2015, 12,5% del total, y a causa de un sistema electoral que favorece a los grandes partidos, el UKIP cuenta sólo con un diputado en el Parlamento, Douglas Carswell, un diputado por Clacton (sudeste de Inglaterra) que se pasó al UKIP desde el Partido Conservador.
Farage es el líder más carismático que tuvo el partido, hoy supuestamente alejado del UKIP pero siempre al acecho, se presentó a seis elecciones de diputado y siempre fue derrotado.
Este martes, en un artículo en el Daily Telegraph, Farage cargó contra Carswell, con quien nunca tuvo buena relación. "Como partido, ¿cómo podemos permitir que nos represente en la Cámara de los Comunes un hombre que busca dañarnos activamente y sin ocultarse?", se preguntó Farage. "Creo que el UKIP tiene poco futuro si él se queda en el partido. Es hora de que se vaya", sentenció.
Farage volvió a la carga porque el gobierno no le concedió la distinción de caballero de la Orden del Imperio Británico. Desde que dimitió tras el referéndum del 23 de junio, todos los intentos de que se le reconozcan sus méritos en el brexit –"el día de la independencia", en sus palabras– no prosperaron: no es sir Nigel, y el gobierno rechazó la demanda de su amigo y nuevo presidente de
Estados Unidos,
Donald Trump, de nombrarlo embajador en Washington.