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Personal excedente, pérdida de socios y estructura insostenible: esto dice el informe final de los veedores del MSP en Casa de Galicia
Para decretar la intervención de Casa de Galicia, el gobierno evaluó varios elementos. Uno de ellos fue los informes realizados por dos veedores del Ministerio de Salud Pública (MSP) -el doctor Luis Fraschini y el contador Oscar Pereyra-, que analizaron la viabilidad del proyecto de Casa de Galicia en caso de acceder al fideicomiso de US$ 12 millones que la mutualista solicitaba e hicieron un repaso de las deficiencias y de las medidas tomadas por el centro en los últimos años.
"La Institución Casa de Galicia enfrentaba por mayo de 2015 problemas económicos y financieros, que desde hacía algunos años se iban agravando, resultado de una administración muy laxa, que no había podido evitar la pérdida de alrededor de 5.700 socios desde 2011 (reteniendo los de mayor edad), reduciéndose su masa social a 55.500 beneficiarios. Ello disminuyó sus ingresos, y no se instrumentaron medidas para la reducción de costos a la nueva escala, ni reorganizar lo gastos de forma de lograr una mayor eficiencia. Su estructura de ingresos y gastos era insostenible", sostienen en el informe que señala que a partir de 2015 se accedió a un primer fideicomiso.
En el informe final sobre la situación financiera de Casa de Galicia, los veedores incorporaron una evaluación de resultados del anterior fideicomiso. Se destaca en primer lugar que los fondos de ese anterior fideicomiso "fueron correctamente aplicados a los destinos prefijados, pero no dieron solución a los problemas de fondo" de la institución. "Solo permitió hacer frente a parte de los endeudamientos bancarios preexistentes, asegurar el pago de salarios al personal, solucionar una pequeña parte de las deudas comerciales, y en muy poca medida realizar nuevas inversiones", señalan los veedores.
En segundo lugar, el informe indica que "el escenario actual de Casa de Galicia en el aspecto económico financiero es muy delicado, y a pesar de los esfuerzos que se vienen realizando por la empresa, para mejorar ingresos y reestructurar gastos, se requiere una rápida inyección de fondos que aporte un mínimo de capital de trabajo para posibilitar el funcionamiento".
Respecto al fideicomiso, el informe concluye que el Proyecto de Viabilidad presentado por Casa de Galicia "se basa" en "supuestos" que "a priori parecen razonables".
Entre otras deficiencias narradas en el informe final, los veedores plantean que "no existió un verdadero plan de reestructuración" entre 2015 y 2019. "El plan fue sumando medidas a lo largo de esos años hasta llegar a 77 en total, que fueron quedando desactualizadas o tornándose imposibles de ser llevadas a cabo, debido a la modificación de la realidad a través del tiempo, no existiendo una conexión entre las iniciativas y los desembolsos autorizados al fideicomiso", dice el documento.
"Cabe señalar que en el periodo transcurrido entre 2015 y 2019, la situación diagnosticada al inicio fue empeorando progresivamente. A modo de ejemplo, los socios continuaron su descenso en aproximadamente 10.000 más, decayendo a un total de 45.328 al final de ese periodo", agregan.
A su vez, en 2020, se "generó un endeudamiento con el BPS, pues para el pago de las obligaciones con el ente público, se entregaron mensualmente cheques diferidos al plazo máximo legal en pago de las obligaciones correspondientes a los últimos 5 meses. Al vencimiento de dichos documentos no era posible en principio cubrir los mismos con el giro propio de Caja y Bancos, por lo que, gracias a la nueva reglamentación aprobada, y la autorización del BPS, Casa de Galicia celebró un convenio de pago con facilidades de acuerdo al régimen establecido. Una vez realizado el convenio, Casa de Galicia sigue manifestando dificultades a partir de junio para realizar sus pagos mensuales de obligaciones de la seguridad social", se señala en el informe.
"A comienzos del mes de julio de 2021, el riesgo financiero institucional continúa siendo muy alto (...) A pesar de los esfuerzos que realiza Casa de Galicia para reducir las pérdidas e incrementar los ingresos, ante la falta de capital de trabajo, y la carencia de financiación bancaria (consecuencia de su calificación en el sistema financiero), el riesgo financiero institucional es crítico, y requiere una inmediata inyección de fondos para continuar funcionando", agrega el informe.
Planes de corto y mediano de plazo
Para los veedores, Casa de Galicia necesitaba un plan de inversiones para sostenerse. En primer lugar solicitar prestamos en Unidades Indexadas con el fin de obtener ciertos objetivos. "Realizar inversiones por US$ 5.200.000 con la finalidad de modernizar la Institución y mejorar los servicios a sus asociados. "Salas de internación, block quirúrgicos (obsoletos y con observaciones del MSP) y CTI. Además, completar el fortalecimiento de los sistemas de información del área técnica (HCE, telemedicina) y el área administrativo contable", detallan.
Otro objetivo del préstamo debía ser "cancelar deudas financieras con acreedores privados por un monto de US$ 4.000.000 lo que permitiría cambiar obligaciones de corto plazo por pasivo de largo plazo" y el último cubrir los déficit de caja hasta que en un plazo 8 a 12 meses la institución no tenga más déficit operativo".
A su vez, se recomendó la renovación y reconversión de áreas como la Alimentación (que ya está en ejecución), Farmacia, Seguridad, Información al asociado, Laboratorio, y Pediatría dado que se constató "la existencia de un importante numero de personal excedente."
