Mundo > Brasil
Relevan a unos cuarenta militares encargados de la seguridad en la residencia oficial de Lula
Unos cuarenta militares de baja graduación designados por el expresidente Jair Bolsonaro para custodiar la residencia oficial del Palacio de la Alvorada fueron relevados de sus funciones.
Se trata de sargentos, cabo y soldados que cobraban una bonificación por coordinar y dar seguridad a la residencia presidencial y que pasarán a cumplir funciones en otros destinos.
Las ordenanzas de la Secretaría General de la Presidencia, con las destituciones, fueron publicadas en la edición del martes del Boletín Oficial, reseñaron los medios locales O Globo y Folha de Sao Paulo.
El relevo de los militares dentro del sitio oficial donde se alojará Lula se dispuso luego de que el propio presidente expresara dudas sobre el accionar castrense durante el ataque los bolsonaristas a los edificios público de Brasilia el 8 de enero.
La Secretaría General también relevó a un teniente que estaba en la Coordinación General de Administración de Residencias Oficiales y un teniente coronel de la PM de Brasilia.
A 18 días de su asunción, Lula no pudo aun mudarse a la residencia oficial de la Alvorada por el estado de conservación del palacio.
El Gabinete de Seguridad Institucional (GSI), encargado de cuidar la seguridad del presidente, el vicepresidente y los palacios presidenciales, también despidió este martes al personal militar.
La cartera destituyó a tres militares del cargo de asesor técnico militar en la Coordinación General de Operaciones de Seguridad Presidencial, entre ellos el teniente coronel del ejército Marcelo Ustra da Silva Soares.
De acuerdo con el Portal de Transparencia del gobierno federal, Marcelo Ustra viajó a fines de diciembre a Orlando, por trabajo, como miembro del equipo de seguridad en el viaje de un familiar de Bolsonaro.
Según el portal Metrópoles, el militar es pariente del coronel retirado Carlos Alberto Brilhante Ustra, considerado uno de los principales torturadores de la dictadura militar (1964-1985) y que fue considerado un "héroe" nacional por Bolsonaro.
Otra detención
En tanto, el segundo acusado del intentar un atentado con bombas en las cercanías del aeropuerto de Brasilia días antes de la asunción de Lula fue detenido por la policía
Se trata de Allan Diego dos Santos, un bolsonarista que participaba del acampe frente al cuartel general del Ejército en reclamo de un golpe de estado militar que evitara la asunción de Lula.
El terrorista se entregó en una comisaría a 677 kilómetros Cuiabá, la capital del estado centro occidental de Mato Grosso.
Dos Santos está acusado junto a otros dos bolsonaristas, uno ya detenido y otro aún prófugo, de colocar un artefacto explosivo junto a un camión cargado de combustible aeronáutico cerca del aeropuerto de la capital.
El 26 de diciembre fue detenido George Washington de Oliveira Sousa, empresario de 54 años, acusado de colocar la bomba en un camión cisterna para que la explosión generara caos y justificara una intervención castrense, según su propia confesión ante la justicia.
