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Sigue la volatilidad en los granos, con balance semanal de suba de valores
En un mercado que como decíamos la semana pasada se ha vuelto volátil, los granos recuperaron buena parte de lo perdido en el ajuste de la semana anterior por las compras fuertes de China y otros demandantes, pero se mantiene una fuerte inestabilidad, porque gradualmente se va perfilando una buena cosecha en el Mercosur.
Ya se descuenta que Brasil tendrá una cosecha récord, más de 130 millones de toneladas de soja, y aunque la zafra de Argentina y Uruguay se definirá en febrero, ambos países ingresarán al segundo mes del año con buena agua en el suelo tras las lluvias que se han instalado y persistirán hasta el jueves próximo.
Las oscilaciones de precios son fuertes y se dan incluso durante el transcurso de una misma jornada, como la de este jueves en que la soja se ofreció de mañana sobre US$ 495 y terminó la tarde en US$ 487, un movimiento inusualmente fuerte derivado de un alto componente especulativo, de las fuertes compras que sigue haciendo China y de los pronósticos meteorológicos en un mercado típicamente climático.
En Uruguay las lluvias llegarán tarde para el maíz de primera, pero el potencial del resto está relativamente salvaguardado por la resistencia de la soja y de los nuevos materiales genéticos que hay en maíz.
Más allá de las oscilaciones, el mercado internacional de granos estará ajustado durante todo este año y se sigue consolidando la idea de una fuerte expansión de las áreas sembradas en Estados Unidos, algo de lo que se empezará a tener pistas firmes en febrero.
Con estos precios se va a sembrar todo lo posible y se ingresará nuevamente en un mercado climático, ya que con tan pocas reservas, en particular de soja, cualquier contratiempo hará saltar al mercado.
Tanto que un artículo de la agencia Bloomberg daba cuenta de que si China sigue comprando a este ritmo Estados unidos tendría que importar soja.
En Brasil ha comenzado la cosecha, los rendimientos son buenos pero no espectaculares y el mercado ajustado persistirá.
En maíz, pasadas las lluvias empezarán las nuevas cosechas. Será difícil que el precio local baje de los US$ 250 por tonelada puesta en destino. En tanto los productores empiezan los preparativos para la siembra de avena, que abre la zafra “de invierno”. El repunte esperado en el precio del ganado y la leche lleva a que haya una firme intención de sembrar.
Los arroceros también avanzan hacia una cosecha favorable con acuerdos para bajar costos de combustible y la posibilidad de que la semana próxima se conozca el resultado del arbitraje de precios de la cosecha de 2018. Se mantiene una expectativa de buen precio para la cosecha que comenzará en el norte en unas tres semanas.
