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Total de muertes en Salto se duplicaron en mayo respecto a años anteriores, debido al covid-19
De los 19 departamentos del país, Salto fue el más golpeado por el covid-19 en mayo. Con 113 víctimas fatales, el departamento del litoral cerró el mes pasado con una tasa de 84,2 fallecidos cada 100 mil habitantes producto de la enfermedad, un registro 80% por encima de la media nacional (46,94 cada 100 mil habitantes).
El impacto del coronavirus en la mortalidad total del departamento no fue menor: la cifra total de fallecidos en Salto durante el mes de mayo duplicó el número de muertes que tuvo el departamento en el mismo mes de años anteriores.
Según datos preliminares de la Intendencia de Salto, a los que accedió El Observador, en mayo murieron 185 personas en el departamento (61% de ellas por covid). En mayo de 2018, según los registros de la comuna, fueron 83 los fallecimientos; en mayo de 2019 murieron 88 personas y un año después, en pandemia pero con la situación controlada, las muertes bajaron a 78.
El intendente de Salto, Andrés Lima, explicó que los datos surgen de "un control de todos los fallecimientos que ocurren en el departamento". "Los cementerios son públicos en su mayoría y los gestiona la Intendencia; los pocos privados están obligados por legislación departamental a brindar información a la intendencia", aseguró. Las cifras de 2018 y 2019 presentan leves diferencias (entre 3 y 6 personas) con los registros del Ministerio de Salud Pública (MSP) procesados por El Observador.
En abril, mes en el que Salto tuvo 45 muertes por covid-19 (lo que lo ubicó en mitad de tabla en la comparación con otros departamentos), en total registró 119 fallecidos. En el mismo mes en 2018, Salto tuvo 83 muertes, y en los dos años siguientes hubo 77.
En abril y mayo de 2021 se registra un salto en la mortalidad total en el departamento. Enero había cerrado con 85 fallecidos, febrero con 81 y marzo con 80.
El mes de junio tampoco arrancó con buenas noticias para Salto, ya que en los primeros seis días se registraron 40 fallecimientos por covid-19.
Polémica por cementerio
En ese contexto de aumento de la mortalidad, Salto fue centro de la polémica en las últimas horas debido a la decisión, por parte de la Intendencia, de ampliar la capacidad del Cementerio del Barrio de Artigas, en la capital del departamento. Según informó Lima, fue a raíz del aumento de muertes por covid-19 que se resolvió adquirir un nuevo predio en el que se realizarán los futuros entierros.
"Esta situación ha llevado a una compleja situación en el Cementerio del Barrio Artigas de nuestra ciudad, en donde se proceden a enterrar los cuerpos de aquellos salteños fallecidos por covid-19, porque tuvimos que empezar a trabajar en nuevas fosas para proceder a enterrar a los ciudadanos fallecidos por coronavirus", dijo el intendente a Subrayado.
El anuncio de Lima, sin embargo, encontró ciertos reparos en la oposición departamental, que denuncia que se podría discutir la posibilidad de enterrar a las víctimas del covid-19 en el Cementerio Central.
Según Facundo Marziotte, edil del Partido Nacional, algunos familiares se quejaron de que no podían enterrar a sus familiares fallecidos por covid-19 en ese cementerio porque la Intendencia de Salto dispuso que fuese en el Cementerio del Barrio Artigas. Marziotte realizó un pedido de informes a la Intendencia, que respondió que según un decreto promulgado el 13 de octubre de 1893, los cuerpos de personas que murieron por enfermedades infectocontagiosas, como lo es el covid-19, deben ser sepultados en tierra y no en los nichos o panteones del Cementerio Central.
"Es absolutamente obsoleto y absurdo el decreto a esta altura", dijo Marziotte a El Observador. "Lima salió a panfletear sobre que el cementerio se está saturando y no está diciendo toda la verdad. El cementerio se está saturando porque tuvo una cantidad de fallecimientos, que no desconocemos y nos duelen todos, pero se está saturando porque se está avalando en un decreto que si se quiere cambiar, lo cambiamos ya", agregó el edil nacionalista.
"Uno a veces siente que hay cierta intencionalidad. Se panfletea como que Salto está en un momento apocalíptico, que no es real y se puede solucionar aggiornando un decreto. Se llevaron a todos los fallecidos por covid ahí (al Cementerio del Barrio Artigas) cuando se lo podría haber llevado a otros lados. De hecho los familiares quieren llevarlos a otros lados. El de Barrio Artigas está llegando a un nivel de saturación obviamente, porque es chico y secundario para la gente que vive en esa zona", apuntó.
Consultado al respecto, Lima informó que este martes ingresará a la Junta Departamental un nuevo decreto que modifica el de octubre de 1893 y que permitirá que las familias del fallecido decidan cómo se hará el sepelio –si en tierra, en un nicho, panteón o si se cremará–. Por lo tanto, con la nueva legislación quienes mueran por covid-19 en Salto podrán ser llevados al Cementerio Central.
Asimismo, el pasado 30 de mayo la Intendencia de Salto comunicó el inicio de "importantes obras en el Cementerio Central" en el marco del "plan de obras civiles de mantenimiento, ampliación y recuperación de edificios públicos" propiedad de la comuna.
Gustavo Chiriff, secretario general de la intendencia, informó en el portal institucional que la obra implica la construcción de 72 nichos y 360 casilleros. “Este es un trabajo que se enmarca dentro de la planificación de ampliar la capacidad de los dos cementerios municipales que cuenta la ciudad. Terminadas las labores en el Cementerio Central, se continuará con el de barrio Artigas”, concluyó, sin hacer referencia específica al covid-19.
