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Walter Gargano reencontró su fútbol y es el que maneja los hilos de este Peñarol exitoso
Mucho se ha escrito hasta ahora de lo que ha repuntado Peñarol futbolísticamente en los últimos tiempos.
En eso ha tenido que ver la impronta del cuerpo técnico comandado por Mauricio Larriera, el mismo que estuvo a punto de quedar fuera luego del 2-2 contra Cerro Largo en el partido de ida de la fase inicial de la Copa Sudamericana.
El entrenador entendió que de los errores se aprende y el consejo directivo aurinegro le dio el visto bueno para que continuara en su labor.
Claro que no es de ahora que aprendió. Si hay algo que distingue a Larriera es el bajo perfil y, dentro del mismo, saber cómo manejar ciertas situaciones. Tener sapiencia ante la adversidad.
Por eso le quiso demostrar al director deportivo Pablo Bengoechea y al presidente Ignacio Ruglio que no se habían equivocado con él una vez que lo eligieron para un cargo de tal responsabilidad, como nunca había tenido, ya que no le había pasado nunca en el exterior.
El momento futbolístico no puede ser mejor. Se consiguieron 12 puntos de 12 en el grupo de la Sudamericana, el mismo grupo del que solamente clasifica el primero según la nueva reglamentación del torneo.
Pero no solo eso. Se ha jugado muy bien, con goles de gran factura técnica y se nota claramente las jugadas de pelota quieta que se ensayan diariamente en Los Aromos. Ese trabajo se ve reflejado en la cancha y en los resultados.
Peñarol, ganó sus últimos cinco compromisos y convirtió 18 goles, dándole un paseo a un equipo brasileño como Corinthians, como casi nunca se ha visto en los últimos 25 años.
Todo el mundo periodístico habla, con razón, del espectacular momento del Canario Agustín Álvarez.
El juvenil de apenas 19 años se convirtió el pasado jueves en el jugador más joven en la historia de la Copa Sudamericana en anotar un hat-trick.
Además, cuenta con un juego muy inteligente, con y sin pelota. Sabe dónde ubicarse en la cancha y va muy bien por arriba.
Recién está dando sus primeros pasos, pero que en 36 partidos jugados haya anotado 17 goles no está nada mal, sobre todo, para un futbolista nacido en estas tierras. No abundan goleadores así y menos a su edad.
Por eso, como indicó Referí, no es para nada exagerada la cláusula de rescisión que impuso Peñarol hace tres semanas cuando renovaron el contrato, por US$ 20 millones.
Hay otros futbolistas que también se han destacado mucho. Se habló y escribió mucho en su momento de Facundo Torres, otro producto genuino de las inferiores y en el que Peñarol y el técnico Larriera tienen puestas muchas expectativas.
Si bien contra Corinthians no llegó a descollar, viene de ser la figura de la semana de la Copa Sudamericana cuando enfrentaron a River Plate de Paraguay en el Estadio Campeón del Siglo.
También jugadores como David Terans -quien no pudo estar contra los brasileños el jueves debido a un estado febril y su ausencia fue muy bien cubierta por sus compañeros- y Giovanni González, quien juega bien como lateral y como volante por derecha o izquierda, han tenido su reconocimiento.
Este último atraviesa seguramente el mejor momento desde que está en Peñarol, y según informaciones que posee Referí, es uno de los futbolistas del club que reservó el Maestro Óscar Tabárez de cara a la Copa América de Colombia y Argentina.
Pero más allá de todos estos buenos valores, hay uno que sobresale.
Quizás hay partidos en los que no se nota mucho, pero nunca faltan esos pases fundamentales, como ocurrió en la ida contra Corinthians en San Pablo cuando habilitó notablemente a Joaquín Piquerez para que este dejara de cara al gol a David Terans para el 2-0.
Se trata de la recuperación de Walter Gargano. Como cuando llegó a Peñarol a mediados de 2017 y mostró un nivel superlativo con el paso de los encuentros, su fútbol está siendo fundamental en Peñarol.
Esa recuperación que se habla, le brinda un balance perfecto a la mitad de la cancha, sobre todo, cuando se complementan muy bien con Jesús Trindade en el doble 5.
Recuperar a Walter Gargano luego de dos operaciones de ligamentos cruzados y con 36 años a cuestas, no es una tarea sencilla. Ni para el técnico, ni para el propio jugador.
"El Mota ha puesto mucho de sí para estar en en nivel que muestra actualmente. Estamos muy contentos con él", dijo a Referí un directivo aurinegro.
En ese contexto, Larriera no dudó y le dio la capitanía apenas se fue el Cebolla Cristian Rodríguez de la institución. Es cierto que era el segundo capitán detrás del exfutbolista carbonero, pero igualmente, el entrenador vio a un líder tanto dentro como fuera de la cancha. Eso también entra dentro de esa recuperación del volante.
En este presente que le sonríe a Peñarol, Gargano tiene mucho que ver. Es quien maneja los hilos del equipo, quien de alguna manera se ha transformado en el titiritero. No siempre deslumbra, pero nunca falla o no baja de 7 puntos en la calificación.
Un día Gargano volvió y Peñarol lo aprovechó. Contra Corinthians el jueves salió con un esguince de rodilla -según informó la sanidad-, pero ya al otro día, el propio jugador se encargó de transmitir tranquilidad y dijo que no tenía nada.
Este domingo por la mañana, entrenó sin inconvenientes junto al resto de sus compañeros en Los Aromos y será titular en el partido más trascendente de los últimos meses cuando el martes sobre la hora 19.15, Peñarol visite a River Plate de Paraguay en busca de la clasificación a los octavos de final de la Copa Sudamericana.
Larriera está feliz con este presente y tiene muy claro su responsabilidad en el mismo. También que son los jugadores quienes hacen esa diferencia y el principal abanderado de este momento, es Gargano, el que lleva el dorsal 23 en su camiseta.
