Esta semana, el Poder Ejecutivo definirá los precios que regirán para los combustibles a partir del sábado 1° de noviembre, lo que será la última actualización del año según la metodología bimestral vigente.
Las cifras del bimestre setiembre-octubre, comparadas con las de julio-agosto, muestran que los precios internacionales de referencia se abarataron tanto en la nafta como en el gasoil.
Esto surge de los datos mensuales que publica la Ursea en su informe de Precio de Paridad de Importación (PPI), que toma como referencia la evolución de los valores en la costa del Golfo de México, en Estados Unidos.
En el período analizado, el PPI ex planta de la refinería de La Teja para la nafta Súper 95 —incluyendo agrocombustibles— se redujo 0,8% en promedio respecto al bimestre anterior, según datos procesados por El Observador.
En el caso del gasoil común, el precio ex planta que arrojó el PPI de la Ursea bajó 1,23% frente al promedio del bimestre previo.
Proyección de precios para noviembre
Tomando en cuenta esas variaciones, las proyecciones de precio en surtidor indican una baja de alrededor de $ 0,20 para la nafta Súper 95, que actualmente se comercializa a $ 78,20 por litro.
En el caso del gasoil 50 S, los cálculos apuntan a una disminución de aproximadamente $ 0,40 en un producto cuyo precio vigente es de $ 50,14 por litro.
Esto, según estimaciones de El Observador, considerando el precio de referencia, el factor de estabilización o sobreprecio ($ 1,5 por litro), los impuestos y el supuesto de que el resto de los componentes de la cadena —como fletes y bonificaciones— se mantengan sin cambios (su paramétrica de ajuste no es pública).
Los valores mencionados en esta nota son una aproximación basada en las tendencias del mercado internacional de los últimos dos meses y tienen en cuenta variables centrales como la dinámica diaria de los precios en dólares en Estados Unidos y la evolución del tipo de cambio a nivel local.
En cuanto al GLP, su precio de paridad de importación también se redujo alrededor de 1% en el último bimestre, en línea con lo observado para el resto de los combustibles.
El supergás se comercializa actualmente a $ 88,46 por kilo. Este producto, cuyo precio ha estado históricamente subsidiado, se ubica $ 8,89 por debajo del PPI. Esa diferencia es la más acotada al menos desde enero de 2020, es decir en casi seis años.
La brecha se financia con un sobreprecio de $ 1,5 en cada litro de nafta y gasoil que se vende en las estaciones de servicio.
Perspectivas para el precio del petróleo
Los últimos datos publicados por la Administración de Información de Energía (EIA) proyectan que las existencias mundiales de petróleo aumentarán, lo que ejercerá una presión significativa a la baja sobre los precios del crudo en los próximos meses.
Se pronostica que el precio del Brent caerá a un promedio de US$ 62 por barril en el cuarto trimestre de 2025 y a US$ 52 por barril el año siguiente.
El crecimiento de la producción estará liderado por los países fuera de la OPEP+, donde se prevé un aumento de 2,0 millones de barriles diarios (b/d) en 2025 y de 0,7 millones de b/d en 2026, según el informe.
Además, el pronóstico de producción de crudo en el Golfo de México, en Estados Unidos, fue ajustado al alza, dado que algunos proyectos están incrementando su producción más rápido de lo previsto.
“Aunque esperamos que la producción de crudo disminuya respecto a su reciente pico a medida que bajen los precios, ahora proyectamos que la producción estadounidense promediará 13,5 millones de b/d tanto en 2025 como en 2026. Nuestra previsión para 2026 aumentó en 0,2 millones de b/d respecto al mes pasado”, señala el informe publicado a comienzos de octubre.
Si se confirman las proyecciones, el contexto internacional de precios más bajos podría contribuir a mantener la estabilidad del mercado interno en los próximos meses.