Yamandú Orsi y Álvaro Delgado se vieron las caras este lunes en el comienzo de una semana especial que terminará con ambos debatiendo mano a mano sobre sus principales propuestas.
Conocidos los resultados de la primera encuesta de Opción de cara al balotaje, que dan una ventaja de 3,4 puntos a Orsi sobre Delgado, ambos comandos ya comenzaron a preparar la instancia, que será la primera de intercambio entre los dos en todo el ciclo electoral ya que el frenteamplista declinó participar antes de octubre bajo el argumento de que la coalición debía resolver primero su “interna”.
El debate, obligatorio por ley, durará dos horas y estará dividido en cinco temas: economía, trabajo, seguridad, desarrollo humano y conocimiento. Dentro de estos habrá subtemas como la producción e inserción internacional, el empleo, el salario, la seguridad social, el crimen, el narcotráfico, las cárceles, la salud, la vivienda, el deporte, la discapacidad, la educación e innovación.
Los candidatos no podrán interrumpirse y sus exposiciones irán de mayor a menor en cada bloque: primero tendrán tres minutos, luego dos y por último uno. Este martes la Corte Electoral junto a representantes de los candidatos terminarán de definir quien abre y quien cierra, y los nombres de los moderadores.
Si bien ninguno considera que la instancia será “decisiva”, porque la mayoría de la población tiene definido su voto, tanto Orsi como Delgado ya comenzaron a procesar información vinculada a los temas y reducirán su actividad pública los últimos días de la semana porque se dedicarán a estudiar a fondo las propuestas y preparar cómo será cada una de las exposiciones buscando minimizar los errores que puedan cometer y explotar al máximo sus virtudes.
La preparación de Orsi
Yamandú Orsi recorrió seis departamentos de cara al balotaje y delegó en los senadores electos las visitas a los pagos a los que no llegará la fórmula antes del 24 de noviembre.
El candidato del Frente Amplio ya no tiene previstas otras salidas intensivas al interior, aunque sí proyecta tener actividades puntuales, concentradas especialmente en el área metropolitana.
Orsi ya se está preparando con sus asesores más cercanos para el debate y no tendrá actividades públicas el día previo al evento, dijeron a El Observador desde su equipo.
Ante la consulta en rueda de prensa sobre si el debate puede "mover la aguja", el candidato respondió días atrás: "Siempre, sí. Yo creo que sí. La gente está esperando. Es buena cosa". El exintendente aseguró también que "la gente está cansada" de que los políticos se pongan "combativos", bajo la premisa de que "la población está esperando respuestas concretas para las cosas que está sufriendo".
En el comando de Orsi, sin embargo, sostienen que el debate es "una instancia más" dentro del largo ciclo electoral y que como tal la van a encarar. Varios dirigentes cercanos al candidato consideran además que el evento no va a mover la aguja y que se está sobredimensionando su posible efecto.
La preparación de Delgado
El candidato se dedicó a recorrer el interior la última semana junto a los líderes de la coalición y permanecerá estos días por la zona metropolitana con agenda privada y participaciones en algunos eventos específicos.
Desde su comando dijeron a El Observador que la preparación full time del debate será a partir del jueves aunque los asesores ya están reuniendo toda la documentación necesaria.
“Me hubiera gustado más temas y con más dinamismo pero aspiro a que sea una buena instancia para que la gente pueda informarse y comparar quién está preparado, pronto para gobernar; quién tiene experiencia; comparar programas, propuestas; comparar quién genera certidumbres, quién genera lo contrario; y sobre todo, quién es creíble para pedirle la confianza a la gente”, dijo Delgado en rueda de prensa.
Show y entretenimiento
Más allá de los reparos por la dinámica, tanto Orsi como Delgado reivindicaron el rol del debate y señalaron que no podía ser un show.
El nacionalista planteó que tuvieron “estrategias diferentes” y consideró que no era un “show” ni “entretenimiento”. “Tiene que ser un ámbito de información. Estamos eligiendo nada más ni nada menos que el presidente de la República”, subrayó.
Orsi, en tanto, consideró que Uruguay es muy “respetuoso” y apela y celebra el “respeto que siempre se ha tenido, que cada cual pueda expresar lo que piensa y que la gente pueda concentrarse en los conceptos y no en el show”. “No debería ser nunca un show”, sentenció.