La Cancillería uruguaya consideró "intempestiva e injustificada" la expulsión de diplomáticos de Venezuela ordenada por el régimen de Nicolás Maduro, luego de que el gobierno de Luis Lacalle Pou no reconociera los resultados electorales del domingo.
Según señalaron fuentes de Cancillería a El Observador, lo que hizo el gobierno uruguayo fue plantear una "preocupación legítima" sobre el proceso electoral y su resultado.
Consideraron además que, en caso de que se efectivice la salida de los diplomáticos uruguayos, se deberá garantizar la seguridad del personal, ya que los accesos al aeropuerto están bloqueados por las fuertes protestas que se desataron en todo el país y que motivaron enfrentamientos con la Policía.
Este lunes el canciller de Venezuela, Yván Gil, divulgó en un comunicado en el que anunció que se había ordenado el retiro de "manera inmediata" de los representantes diplomáticos de Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay.
Consideró a los gobiernos de esos países de "injerencistas" y de formar parte de un "grupo de gobiernos de derecha", que están "subordinados a Washington y comprometidos abiertamente con los más sórdidos postulados ideológicos del fascismo internacional, tratando de reeditar el fracasado y derrotado Grupo de Lima".