Cuando iban 31 minutos, el juez fue llamado por el veedor del encuentro y detuvo el pleito. El partido estuvo parado por un minuto.
La hinchada de Peñarol entonaba cánticos que recordaron el asesinato de un parcial de Cerro.
Ante la acción, Bentancor detuvo el juego y dos veces por los altoparlantes del estadio de Cerro se recordó a los parciales que esos comportamientos están prohibidos.
En el segundo tiempo, a los 62 minutos, el juez retiró de la cancha una piedra que cayó al campo de juego y se la entregó al veedor. La piedra provino de la hinchada local.