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Boric aceptó la renuncia de su ministra de Justicia en medio de la controversia por los indultos
"Debido a que hubo desprolijidades en la ejecución de mi decisión de conceder indultos y considerando además la necesidad de fortalecer la gestión política del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, decidí aceptar la renuncia de Marcela Ríos Tobar a dicha cartera", dijo Boric durante una conferencia este sábado.
"Cuando en política suceden situaciones de estas características debemos asumir las responsabilidades. En su reemplazo, nombré al destacado abogado don Luis Cordero Vega", señaló.
La renuncia de Ríos se produjo luego de que los partidos opositores y de derecha Renovación Nacional y Unión Demócrata Independiente (UDI) anunciaron la presentación, el próximo lunes 9, de una acusación constitucional en contra de la ahora exministra.
El juicio político se llevará a cabo en el Congreso Nacional, donde el oficialismo no tiene la mayoría.
La acusación constitucional procede del otorgamiento de 13 indultos presidenciales, el pasado 30 de diciembre, que favoreció a 12 condenados por hechos ocurridos durante estallido social que comenzó en octubre de 2019.
El perdón presidencial también se hizo extensivo a un exintegrante del grupo armado Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), condenado por el asalto a un banco en 2013.
Si bien los indultos presidenciales son una atribución garantizada por la república chilena, siempre generaron polémica, como cuando el ex mandatario Sebastián Piñera se lo otorgó a condenados por crímenes de lesa humanidad durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Esta vez, la controversia por los indultos de Boric (una de las promesas de campaña del presidente) se generó al conocerse el prontuario de uno de los favorecidos, quien tenía condenas previas por robos con violencia y por un hurto.
El llamado estallido social dejó una treintena de muertos, unas 400 personas con heridas oculares por la represión policial y miles de agentes heridos.
Ríos también estaba cuestionada por su gestión en el nombramiento del fiscal nacional, cuyos dos primeros nombres propuestos por el presidente fueron rechazados por el Parlamento. Un tercer candidato para ese cargo debe votarse este lunes.
La salida de Ríos, el tercer cambio ministerial en nueve meses de gestión, constituye un nuevo tropiezo presidencial, cuyo mayor golpe fue el rechazo a la propuesta de nueva Constitución con el que su gobierno se había comprometido.
