En octubre de 2000, en oportunidad del partido de Uruguay con Argentina por las eliminatorias para el Mundial de 2002 en el Centenario, el Chino Álvaro Recoba tuvo un entredicho con el técnico Daniel Passarella.
El Chino confesó que se retiró "enojado y caliente" cuando a los 70 minutos fue sustituido por Sebastián Abreu. Recoba aclaró que en ningún momento pretendió insultar a Passarella, informó El Observador en aquel entonces.
¿Qué pasó? Cuando el técnico ordenó el ingreso de Abreu la imagen televisiva difundió a un Recoba desencajado, que se resistía a abandonar la cancha. Incluso, el técnico debió intervenir para que el Chino dejara el campo de juego cuando Uruguay disponía de un tiro libre que podía aprovechar Abreu con un cabezazo. "Fue un momento de calentura y de tristeza. Me sentí impotente porque advertí que hasta ese momento no pude hacer mucho por el equipo. Entonces reaccioné y hasta me sorprendí con la decisión. Después hablé con Sabella (ayudante del técnico) y le pedí que le dijera a Daniel que salí enojado y caliente pero que nunca pretendía insultarlo".
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