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Gerente general de OSE asegura que mantendrán "continuidad del servicio" de agua y espera que "no empeore en su calidad"
El gerente general de OSE, Arturo Castagnino, aseguró que el ente mantendrá el servicio de agua en el área metropolitana, y espera que "no empeore en su calidad", en medio de una sequía que llevó a OSE a aumentar la salinidad del agua que brinda a la zona para mantener su abastecimiento.
"Vamos a mantener la continuidad del servicio y esperamos que esto no empeore en su calidad", dijo Castagnino en una entrevista con Informativo Carve (Radio Carve).
El gerente general indicó que hubo "dos razones fundamentales" para que OSE decidiera "mantener la continuidad del abastecimiento" en la capital uruguaya con un agua más salada: en primer lugar, el organismo buscó "evitar los riesgos más importantes, los biológicos, microbiológicos, virales". "Si no hay continuidad seguramente no hay calidad", detalló el ingeniero.
La segunda razón, según Castagnino, fue "la continuidad del servicio" y del "saneamiento de las viviendas" o, en otras palabras, "que las familias puedan utilizar los baños". Con esto, OSE quiere "evitar instalarse en un riesgo sanitario muy peligroso" y sostener la "dignidad de las personas de no vivir en un ambiente que a toda luz es perjudicial".
Paso Severino "se llenó dos veces" en 2022
Castagnino declaró que la represa de Paso Severino, que abastece al área metropolitana, "el año pasado se llenó dos veces".
El gerente general primero recordó la última vez que se llenó la reserva, el 23 de noviembre de 2022, cuando al ocupar sus 65 millones de metros cúbicos de agua de capacidad la construcción "dejó de rebalsar".
Luego rememoró que en la semana del 28 de enero al 3 de febrero de ese año pasaron "18 millones de metros cúbicos por encima de la cresta" de la reserva (no se potabilizaron), lo que equivale a "30 días de consumo medio diario en el área metropolitana".
Además, indicó que en esa semana pasaron varios millones de metros cúbicos en distintas reservas: en San José pasaron 60 millones, equivalentes a "60 días de consumo" y en Santa Lucía fueron 105 millones (175 días de consumo).
Casupá y Arazatí
Según Castagnino, si la represa de Casupá "hubiera estado construida" para el año pasado hubiese sumado 100 millones de metros cúbicos de reserva a Paso Severino, lo que daría un total de 165 millones de metros cúbicos de agua disponible, equivalente a "siete meses" de consumo. En sus cálculos, aún con esa construcción "en junio estaríamos en el mismo lugar que ahora".
Para Castagnino es importante la construcción de una nueva planta potabilizadora en Arazatí, para "tener dos centros de producción" para el área metropolitana. "Debemos tener, para el 60% de la producción del país, dos fuentes diferentes, y en lo posible interconectadas, para eso es Arazatí", destacó.
El ingeniero indicó que "nunca estuvo bajo el radar de la OSE un colapso total en la planta de Aguas Corrientes, y en la línea de bombeo", y por ello es relevante la construcción de una segunda planta que asegure la producción de agua potable.
De todas formas, el gerente general indicó que "se había formado un dilema de falsa oposición" entre las construcciones de Casupá y Arazatí, cuando en realidad "las dos obras son necesarias". Junto a la explicación ya mencionada del segundo proyecto, Castagnino indicó que la represa de Casupá es necesaria para abastecer a Aguas Corrientes, que "seguirá siendo la columna vertebral", y entiende que en algún momento "va a ser necesario reforzar su sistema de agua bruta".
