La Intendencia de Montevideo (IMM) comenzó este jueves a entregar una primer partida de 10 mil canastas de alimentos que están destinadas a los trabajadores informales que son beneficiarios de los programas sociales de la comuna o relacionados con ella de alguna manera, como los cuidadores de autos y vendedores ambulantes.
El atrio municipal, los municipios y el Estadio Centenario fueron los tres lugares elegidos para distribuir estas primeras canastas, que tendrán productos básicos de alimentación y limpieza, con una vigencia de consumo de 15 días y pensadas para núcleos familiares de cuatro personas.
Para definir a los beneficiarios, la intendencia debió echar mano a las listas de inscritos en varios programas sociales, así como al cruzamiento de datos con el Banco de Previsión Social (BPS) y el Ministerio de Desarrollo Social (Mides).
Las canastas cuentan con una etiqueta que lleva nombre, apellido y cédula de la persona que la recibirá.
El director de Gestión Humana y Recursos Materiales de la IMM, Eduardo Brenta, explicó a El Observador que a instancias de la bancada de ediles del Frente Amplio (FA) en los próximos días la comuna migrará hacia un sistema de vouchers, que tendrán un valor similar al de una canasta alimenticia.
Con los vouchers, explicó Brenta, la comuna busca que la cadena de pagos no se vea afectada y que el impacto económico sobre los pequeños y medianos comerciantes no sea tan grande. El razonamiento que sigue la intendencia es que con la entrega de canastas, cuyos productos son comprados al por mayor a fabricantes grandes, habrá menos personas comprando en los comercios locales (como almacenes, puestos de verduras, pequeños supermercados), que ya de por sí están golpeados por la baja en el consumo.
"Nos estamos preocupando por la emergencia sanitaria pero también porque el comerciante no se caiga, corte la cadena de pago y eso redunde en la pérdida de más empleos", señaló el jerarca.
El voucher que recibirán los beneficiarios será nominado, también canjeable en los comercios por productos de limpieza o alimentos. "La gente va a optar por lo que comprar de lo que más necesite y además fortalecerá el comercio de cercanía, las micro y medianas empresas", explicó el exministro de Trabajo.
Si bien está decidido que se pasará a ese régimen, lo que resta ahora es ponerse en contacto con los comerciantes y llegar a acuerdos para que los beneficiarios puedan canjear los vouchers.
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