La legalización de la marihuana en Uruguay no parece haber influido en el ingreso de drogas proveniente de otros países. No lo fue al menos en la detectada por la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) en 2017, que incautó 40 paquetes provenientes del exterior con distintos tipos de sustancias ilegales.
La cifra supone un aumento de casi el doble con respecto al año anterior y tiene un valor superior a los U$S 3 millones.
Holanda, uno de los primeros países a los que se suele asociar el consumo de drogas, es el primero en la lista de procedencia de los paquetes decomisados en 2017. El 58% de las incautaciones hechas por la DNA procedían de los Países Bajos y contenían en su mayoría drogas sintéticas.
Amsterdam, sí. Pero también Amberes (Bélgica) o Dresde (
Alemania) aparecen en un resumen del estudio del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (Emcdda) que dio a conocer hace pocos días la revista Vice, como algunas de las ciudades europeas asociadas con el consumo excesivo de drogas. A Uruguay también llegaron paquetes provenientes de Bélgica y Alemania en 2017.
España, Francia, Hungría,
Argentina y Brasil son el resto de los países de los que salieron drogas que fueron incautadas por la la DNA en su ingreso al país.
Mientras que en 2015 se decomisaron 15 paquetes y en 2016 fueron 22, este año la cifra llegó a 40.
Drogas por correo
La mayor parte de estas incautaciones se dieron en la Administración de Aduanas de Carrasco, en el control que se realiza a las encomiendas postales procedentes del exterior. Las restantes fueron realizadas en el Centro de Distribución Internacional del Correo Uruguayo, en la Administración de
Aduanas de Fray Bentos, Administración de Aduanas de Rivera y Administración de Aduanas del Chuy.
Marihuana no oriental
Si se analiza lo incautado en gramos, puede notarse un fuerte predominio de marihuana; con 93% del total. Del resto, el 4% corresponde a cocaína y un 2% a éxtasis. En concreto, 12 kilos de cocaína, 408 ladrillos de marihuana y 12.640 pastillas de éxtasis.