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Los tres poderes brasileños rechazan en forma conjunta el asalto de bolsonaristas
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva y los jefes de los poderes Legislativo y Judicial, llamaron a mantener la “serenidad” y “defender la democracia” en paz, tras el asalto de miles de radicales bolsonaristas.
En una declaración firmada por Lula, el senador Vital do Rego, presidente del Senado, el diputado federal Arthur Lira, presidente de la Cámara de Diputados y Rosa María Pires Weber, presidenta del Supremo Tribunal Federal, los poderes de la República “rechazan los actos terroristas, de vandalismo, criminales y golpistas” que acontecieron en Brasilia.
Los firmantes destacan su unidad para defender las instituciones en paz y democracia en el marco de las leyes vigentes y afirman la necesidad de “normalidad, respeto y trabajo” para el progreso y la justicia social en el país.
Por su parte, en un comunicado conjunto, El Supremo Tribunal Federal, el Tribunal Superior Electoral, el Tribunal Superior de Justicia, el Tribunal Superior del Trabajo y el Tribunal Superior Militar, han hecho pública su “indignación” por los “graves hechos” ocurridos el domingo “con actos de violencia contra tres Poderes de la República y destrucción de bienes públicos”.
La nota fue firmada por Rosa Maria Weber (presidenta del Supremo Tribunal Federal); Alexandre de Moraes (presidente del Tribunal Superior Electoral); Maria Thereza de Assis Moura (presidenta del Tribunal Superior de Justicia); Lelio Bentes Corrêa (presidente del Tribunal Superior del Trabajo); y Lúcio Mário de Barros Góes (residente del Tribunal Superior Militar).
Todos ellos reiteran a la nación brasileña el compromiso de que el Poder Judicial “se mantendrá firme en su rol de garante de los derechos fundamentales y del Estado Democrático de Derecho, velando por el imperio de la ley y la plena responsabilidad de quienes la violan”.
Detenidos
En cuanto a la orden dada por las autoridades para que se desmonten los campamentos que los bolsonaristas habían montado frente al cuartel general del Ejército en Brasilia, se informó que este lunes se produjo el desalojo de estos en forma pacífica y que 1.200 seguidores del expresidente Bolsonaro fueron detenidos por fuerzas policiales y militares que habían rodeado el lugar.
Los detenidos fueron conducidos en autobuses hasta la sede de la Policía Federal donde serán identificados y eventualmente arrestados aquellos que sean señalados como participantes de actos vandálicos. Los 1.200 detenidos en esta oportunidad se suman a los 300 que ya habían sido puestos en custodia el domingo durante los desórdenes.
