Mundo > DIÁLOGO

Ortega pidió que no siga "corriendo la sangre de hermanos" en Nicaragua

El presidente nicaragüense negó que hubiera desaparecidos
Tiempo de lectura: -'
16 de mayo de 2018 a las 16:45

La iglesia católica inauguró este miércoles un diálogo en Nicaragua para superar la grave crisis que ya tiene casi un mes de protestas que dejaron 58 muertos.

"No debe seguir corriendo la sangre de hermanos en Nicaragua" y "la policía tiene órdenes de no disparar" a los manifestantes, dijo el presidente Daniel Ortega tras abrirse el diálogo, que se desarrolla en el seminario de Nuestra Señora de Fátima de la capital.

La desconfianza entre las partes es total y los opositores dijeron en un comunicado que defenderán sus derechos y exhortarán a seguir en la lucha pacífica.

La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), que preside el cardenal Leopoldo Brenes, es mediadora en el diálogo, en el que los sectores estudiantiles, empresarios y la sociedad civil que se oponen al gobierno buscan una democratización e incluso la renuncia de Ortega.

El presidente aseguró que "nadie está de acuerdo con la muerte de los jóvenes de diferentes tendencias políticas" y negó que hubiera desaparecidos o prisioneros políticos.

Lea también: Crisis política en Nicaragua aumenta la presión contra el presidente Ortega

Mientras pronunciaba su discurso, fue interrumpido varias veces con gritos de "cese la represión" y "asesino", por representantes estudiantiles que participan en las conversaciones. Los estudiantes son los que han sufrido mayores muertes con la represión de las manifestaciones.

El gobierno manifestó su interés en hacer justicia por los muertos y por eso ha "invitado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)", dijo Ortega. Además, agradeció a la CEN y al cardenal Leopoldo Brenes por su "esfuerzo extraordinario" para que se instale el diálogo.

Es la primera vez que Ortega accede a dialogar con sus opositores. Durante los últimos años ha gobernado con un control casi absoluto del país y se ha visto acorralado por las masivas protestas. Su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, también participa del diálogo.

Además de 58 muertos, las manifestaciones dejaron cerca de medio millar de heridos, más de 60 personas aún desaparecidas, y caos en diversas ciudades a causa de los saqueos e incendios en las calles.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...