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Productores de cebada hicieron buenos negocios
Malterías propusieron políticas comerciales atractivas y hubo altos rendimientos
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24 de enero de 2016 a las 05:00
Los altos rendimientos productivos y buenos acuerdos comerciales con las malterías permitieron a los productores de cebada realizar muy buenos negocios en la última zafra. En marzo de 2015 las malterías salieron al mercado con la política comercial de fijar el precio de los primeros 1.000 kilos por hectárea, lo que incentivó a que mucha gente sembrara. El precio del resto de la producción se fijó a través de Chicago, y la mayor parte de los productores cerraron una muy buena zafra.
Los altos rendimientos y un precio promedio entre US$ 190 y US$ 200 por tonelada fueron muy favorables, dijo a El Observador el gerente comercial de Erro, Germán Bremermann.
Señaló que eso permitió una rentabilidad muy interesante, pero sin embargo eso no tiene gran importancia a nivel país porque en Uruguay no se siembran más de 100 mil hectáreas de cebada. Reconoció que ese buen resultado ayuda, pero el agricultor sigue muy jugado a la soja.
El resultado del negocio del trigo fue muy diferente. La calidad fue excelente, salvo algún inconveniente en el nivel de proteína, que fue más bajo que el que se exige para el trigo de calidad panadera, "pero es algo negociable y ese trigo tiene como destino un molino, quizá no sirva para pan, pero sí para hacer galletas. No se trata de un trigo forrajero, tiene otro destino y otro precio", dijo.
Si bien el rendimiento fue muy bueno, el actual precio es muy malo y "asusta el rendimiento que hay que sacar para que el negocio sea positivo", dijo Bremermann.
La venta de trigo viene muy lenta. Brasil está comprando, pero de a poco, y además la oferta de Argentina es muy grande, porque a la última producción se suman los stocks de zafras anteriores. La situación comercial es muy difícil y eso está marcando los niveles de precios y el ritmo de negocios del mercado.
Bremermann señaló que la empresa Erro exportó un barco con trigo y está con la expectativa de concretar otro embarque a Brasil. El objetivo es descomprimir el negocio y a la vez hacer caja. Mucha gente necesita vender para poder seguir produciendo".
Los altos rendimientos y un precio promedio entre US$ 190 y US$ 200 por tonelada fueron muy favorables, dijo a El Observador el gerente comercial de Erro, Germán Bremermann.
Señaló que eso permitió una rentabilidad muy interesante, pero sin embargo eso no tiene gran importancia a nivel país porque en Uruguay no se siembran más de 100 mil hectáreas de cebada. Reconoció que ese buen resultado ayuda, pero el agricultor sigue muy jugado a la soja.
El resultado del negocio del trigo fue muy diferente. La calidad fue excelente, salvo algún inconveniente en el nivel de proteína, que fue más bajo que el que se exige para el trigo de calidad panadera, "pero es algo negociable y ese trigo tiene como destino un molino, quizá no sirva para pan, pero sí para hacer galletas. No se trata de un trigo forrajero, tiene otro destino y otro precio", dijo.
Si bien el rendimiento fue muy bueno, el actual precio es muy malo y "asusta el rendimiento que hay que sacar para que el negocio sea positivo", dijo Bremermann.
La venta de trigo viene muy lenta. Brasil está comprando, pero de a poco, y además la oferta de Argentina es muy grande, porque a la última producción se suman los stocks de zafras anteriores. La situación comercial es muy difícil y eso está marcando los niveles de precios y el ritmo de negocios del mercado.
Bremermann señaló que la empresa Erro exportó un barco con trigo y está con la expectativa de concretar otro embarque a Brasil. El objetivo es descomprimir el negocio y a la vez hacer caja. Mucha gente necesita vender para poder seguir produciendo".
