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Revive el conflicto portuario en Montevideo y amenaza con afectar el comercio exterior
¿Si te quedas sin trabajo vamos a tener que ir a comer a una olla?', le preguntó su hija, según contó un trabajador que pidió la palabra durante la asamblea del Sindicato Único Portuario y Ramas Afines (Supra). Tras el anuncio de 150 despidos en la empresa Montecon, el Supra aprobó este jueves un paro de 24 horas en el puerto de Montevideo con corte de horas extras y guardias que se extenderá hasta media tarde de este viernes.
Asimismo, se mandató a la dirección del sindicato a implementar un plan de movilizaciones, que comenzará el lunes 9 de mayo con paros sectoriales por empresa. También está sobre la mesa un paro nacional de 72 horas. Las medidas están sujetas al avance que puedan tener las negociaciones que tienen lugar en estas horas. El conflicto se da en medio de una cosecha de soja, que apunta a ser de las mejores de la última década con una producción del eje de los 3 millones de tonelada.
Esta reedición del conflicto portuario amenaza con afectar nuevamente al comercio exterior. En octubre pasado medidas sindicales que se extendieron por dos semanas golpearon fuertemente la operativa y provocaron demoras y cancelaciones en el puerto de Montevideo.
El Supra también decidió que no se atenderán barcos de Mediterranean Shipping Company (MSC) de la línea Mediterránea. MSC comunicó el mes pasado desde su sede en Ginebra que dejará de utilizar a Montecon para ese servicio en Montevideo, y se pasará a la terminal especializada (Terminal Cuenca del Plata –TCP-), que tiene a la belga Katoen Natie como accionista mayoritario (80%) y a la Administración Nacional de Puertos (ANP) con una participación del 20%. Hay otros tres servicios de MSC desde Montevideo a otras partes del mundo, de los cuales Montecon mantiene únicamente el que conecta con el norte de Europa.
La actividad y operativa del puerto de Montevideo ya tiene modificaciones en dirección a centralizar la operativa de contenedores en la terminal especializada. El nuevo reglamento de atraque se puso en práctica por primera vez en noviembre del año pasado. En ese escenario de cambio de reglas, la línea GS1 —que realiza la ruta del Golfo de México, Centroamérica y América del Sur— dejó de operar con Montecon y pasó a operar con TCP. Esa línea realiza unas seis escalas mensuales con el puerto de Montevideo.
A eso se sumó la decisión de MSC de seguir el mismo camino. En este caso el traspaso de servicios se da por decisión propia de la naviera, y no por obligación que es lo que hubiera ocurrido si se aplicaba el nuevo reglamento.
Si hay despidos “habrá conflicto”
En una concurrida asamblea de casi dos horas hubo fuertes críticas hacia el gobierno y reclamos para que se anule el nuevo reglamento de atraque que le asegura a TCP la prioridad para la operativa de buques con contenedores.
“Ningún trabajador se puede quedar sin trabajo por culpa de este acuerdo que el Estado hizo con Katoen Natie y que no es nada bueno”, afirmó el secretario general de Supra, Álvaro Reinaldo. Y explicó que el nuevo protocolo de atraque se evalúa cada 45 días y “si sigue activo nadie asegura que en pocos meses haya una situación similar”.
Durante el encuentro se insistió en la necesidad de que exista “unidad” entre los trabajadores, sin importar a que empresa “pertenezcan”, y en que “si hay despidos habrá conflicto”. Así lo repitieron varios de los oradores a lo larga de la mañana.
"Lo único que pedimos es que nos dejen tener la puta dignidad de mantener con trabajo a nuestras familias", dijo otro trabajador del área de estibas. Otro asambleísta llamó a unirse para "doblegar al gobierno” que definió como “alcahuete” y que , según dijo “lo único que quiere es pisotear trabajadores".
La asamblea también reclamó que tanto el gobierno como la empresa Montecon “empiecen a hablar de soluciones”. Estas pasan, según el sindicato, desde que sea ANP o TCP quienes absorban los puestos laborales que hoy están en riesgo. También se habló de evaluar retiros voluntarios con despidos incentivados.
Por otra parte, el Supra estima que otras empresas subsidiarias podrían verse afectadas por la menor operativa de la firma chileno canadiense, y con ello se perderían otros 50 puestos de trabajo. Las audiencias en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social están previstas para la semana que viene.
La decisión adoptada recientemente por MSC implica para Montecon la pérdida de 100 mil movimientos anuales, que se suman a 80 mil movimientos perdidos en noviembre con el pasaje de GS1 a TCP.
De noviembre a la fecha Montecon perdió el 70% del tamaño de movimientos. “Concretamente con los números a marzo que veníamos moviendo, la salida de este servicio implica perder el 50% de los movimientos que teníamos. Pasamos a tener un movimiento anual similar a lo que hacíamos en 2006”, había dicho a El Observador, el gerente general de Montecon, Martín González.
Montecon emplea actualmente a unas 395 personas de manera directa, y a alrededor de 200 en forma indirecta. La portuaria se encuentra en trámites de realizar un juicio internacional al Estado uruguayo por el acuerdo con TCP que extendió por 50 años hasta 2081 la concesión de la terminal especializada de contenedores a Katoen Natie.
