A lo largo de su historia futbolera, Luis Suárez deleitó al mundo con sus juego, su capacidad agonística y sobre todo con sus goles. Pero fuera de la cancha siempre dio que hablar por su carácter, por su hombría de bien y por la forma en que defendió a sus equipos y su país.
Formado en Nacional, con pasajes por Groningen, Ajax, Liverpool, Barcelona, Atlético de Madrid, nuevamente Nacional, Gremio y actualmente en Inter Miami, Suárez anunció este lunes su retiro de la selección de Uruguay luego de 17 años de carrera.
Este es un repaso a su carrera con una colección de algunas de sus frases en momentos cruciales de la misma.
El tercer puesto de la Copa América 2024
"Estoy contento de lo bueno que se viene haciendo en la selección; tenemos un amor propio que nos obliga a jugar después de unos días duros, difíciles. A nadie le gusta jugar por el tercer puesto, pero Uruguay te obliga a esto. Nuestra exigencia como grupo, lo habíamos hablado, que Uruguay nos exige seguir jugando. Hay que disfrutar como si fuera la última", y se sonrió. Y luego acotó: "La vez pasada me llevé un pedazo de red en las Eliminatorias pensando también que podía ser la última vez".
La bronca con Miguel Borja tras perder con Colombia
"Son situaciones de juego que prefiero queden ahí -expresó sobre Mina-. Siempre hay rifirafe; lo que más molesta es la forma de babosear de Borja, que no tiene sentido. Nosotros eliminamos a Brasil y no lo hicimos, sabemos lo que se siente y somos compañeros de profesión. Pero bueno, el de arriba está mirando todo y todo vuelve. Queda la sensación amarga de no poder llegar a la final del día 14. Ser consciente que cada uno dio el máximo hasta el final, intentamos pelear el partido, no se pudo y será autocrítica y ver imágenes que se ven no es bueno para nosotros ni el fútbol. Tenemos que pensar en levantar el grupo que ahí se ve la fortaleza del grupo".
La previa a su última Copa América
“No sé si soy el pibe de 37, pero la verdad que me siento mucho mejor de lo que fue en mi época buena”. “Porque a medida que pasa el tiempo uno se va cuidando más y se van viendo esos detalles, que hoy en día va evolucionando todo. Ese trabajo físico que en mi época no había. Yo cuando empecé en la selección, o más tiempo, hasta la hora de empezar el entrenamiento era tomando mate”, recordó. “Sí tenías algún caso específico de algún compañero que estuviera haciendo gimnasio. Pero trabajo preventivo de lesiones o para uno querer mejorar en detalles, no había”.
Su forma de vivir el fútbol
“Yo soy de la teoría de que si me insulta un rival, me dice que soy malo, me dice de todo o se mete con mi hermana, yo no iré jamás a la prensa a contarlo. Lo aguanto todo. Ni me molesta ni me duele, es parte del juego. En algunos partidos lo pienso e intento estar más tranquilo, pero no hay manera. Cuanto más tranquilo estoy, más incómodo me siento”.
La previa a la épica remontada a PSG con Barcelona
“El partido contra el PSG va a durar 94-95 minutos y hay que ser pacientes. Hay que ser ambiciosos pero no jugar a la desesperada y volvernos locos en el primer minuto. Si hay un equipo que puede hacer cuatro goles es el Barcelona, pero con nuestra forma de jugar, con nuestro estilo. Es difícil, complicado, pero no imposible”.
La mordida a Giorgio Chiellini en Brasil 2014
“El castigo hay que aceptarlo. Me equivoqué y lo he pasado muy mal. Fue un momento muy difícil. He tratado con profesionales para que no ovuelva a suceder. Cometí un error y perdí perdón en su momento, de los errores también se aprende. Los jóvenes piensan que los tratamientos con psicólogos son para locos, pero a mí me ayudó mucho. Era cabeza dura, pensaba que no la necesitaba, pero me ayudó para ver las cosas de otras maneras, tanto en mi casa con mi familia e hijos como en la cancha”.
Su llegada a Barcelona, el gran sueño de su carrera
“He visto muchas veces al Barça en el Camp Nou. Estuve en el 5-0 al Madrid, en el 4-1 al Arsenal… Me gustaba mucho venir como espectador. Estar ahora como futbolista es un sueño”.
El cambio de puesto en Barcelona
“Fue en un partido contra el Ajax porque Leo venía jugando de falso nueve. Yo jugaba con Ney, abiertos. Leo me dice en el partido: ‘Gordo, andá vos de nueve que yo me abro a la derecha’. Ahí me empecé a sentir bien. Luis Enrique nos preguntó si estábamos cómodos y ahí empezamos a jugar todos ahí arriba. Había que respetar al mejor jugador del mundo que venía de ganar todo con Guardiola”.
Cuando salió a defender a Uruguay
“A los otros que hablan de que Uruguay juega mal, pega, discute, etc, que recuerden que Uruguay tiene 15 Copas América. Así que los que se quejan, que miren por su país, que no tienen ningún título… ¡Vamos Uruguay, vamos!"
El MSN, el gran tridente que formó en Barcelona
“Decían ‘cómo van a hacer para jugar los tres’, pero sabíamos que, si cada uno cumplía nuestra función, íbamos a hacer grande al Barcelona. Lo grupal quería triunfar, no había egoísmo. Me ponía feliz cuando Ney o Leo metían un gol. Me daban los penales y tiro libres para que ganara la Bota de Oro. Afuera de la cancha era espectacular entre los tres, siempre nos hacíamos bromas”.
Sobre Walter Ferreira y su épica ante Inglaterra en Brasil 2014
"Walter (Ferreira) va a ese mundial con una autorización a medias porque no tenía el alta médica. Tenía el alta, pero no le aconsejaban porque no tenía los suficientes glóbulos rojos para hacer una vida normal. Se estaba haciendo quimioterapia. Y yo cuando tengo la lesión le dije, si no vas al Mundial yo no voy. Y él me dijo voy a ir al Mundial y para mí fue un plus, porque una persona así, que se está jugando la vida, diga no importa voy a acelerar todo para ir al Mundial porque yo le estaba pidiendo, no tengo palabras de agradecimiento. Previo al partido con Inglaterra le dije, 'Walter me duele un poco la rodilla del lado de adentro'. Me dice 'no te duele nada'. Yo le insistía. 'No te duele, estás cagado y no te duele nada'. Entonces le digo 'no estoy cagado nada y te lo voy a demostrar'. Ahí me hizo un cambio y en el calentamiento entré al vestuario, se me fue el dolor. A los dos días de operado fui a su casa con la muleta, y dice 'que haces con esa muleta'. Me caigo, le dije. 'No te caés nada'. Me ayudó y no tengo palabras. Volví y le hice dos goles a Inglaterra, donde de que me habían lesionado. Lloramos juntos en el vestuario".
Su despedida de Nacional en 2022
“Mis hijos se querían quedar en Nacional en diciembre. Me decían: ‘¿Papá, por qué no nos quedamos?’. Y les digo: ‘Sabés qué pasa, en el fútbol no tiene memoria la gente. Si yo me quedaba en Nacional después de los tres meses que pasé, divinos, espectacular, que fue algo inolvidable, que nadie se imaginaba de la forma en que empezó y la forma en que terminó, vos te quedás un año más en Nacional, no rendís lo que esperan y ya empiezan las críticas, que está robando la plata”.