Robert Redford, arquetipo de héroe de Hollywood y a la vez defensor del cine independiente estadounidense, murió este martes a los 89 años. El veterano actor participó en más de 70 películas y dirigió nueve largometrajes, pero hay algunos títulos ineludibles en su filmografía que se prestan para ver en una despedida por todo lo alto.
Con este wéstern de George Roy Hill, inspirado en una historia real de finales del siglo XIX, la carrera de Redford despegó. En ella forma junto a Paul Newman el carismático dúo entre Butch Cassidy y Sundance Kid —nombre que dará a su propiedad en Utah y luego a su festival de películas independientes—. Estos dos gánsters son también cómplices en el arte de dinamitar trenes. Esta película, con su conocida melodía de Burt Bacharach Raindrops Keep Fallin' on My Head, marcará el inicio de una gran amistad entre Redford y Newman. Un clásico atemporal.
Tras los cuatro Oscar que se llevó Butch Cassidy, George Roy Hill volvió a reunir a Redford y Newman en El golpe —The sting— y su también pegadiza melodía. Newman es Henry Gondorff, un maestro del engaño que se asocia con un joven estafador (Redford) para tender una trampa al capo de la mafia local en el Chicago de los años 30. La película, ganadora de siete estatuillas, funciona como una obra de teatro (con una escenografía, una trama y una música extremadamente cuidadas) en la que el espectador, que cree estar al tanto del secreto de los dos estafadores, acaba siendo engañado.
Todos los hombres del presidente (1976)
Clásico del cine político estadounidense y del cine sobre periodismo, Todos los hombres del presidente, de Alan Pakula, narra la investigación con la que los icónicos Bob Woodward (Redford) y Carl Bernstein (Dustin Hoffman), dos periodistas del Washington Post, sacaron a la luz el escándalo del Watergate y provocaron la caída de Richard Nixon.
La producción del largometraje fue una iniciativa del propio Redford. Pakula lo construyó como una película policíaca, reconstruyendo minuciosamente los hechos y gestos de los dos investigadores y el ambiente del conocido diario estadounidense. La película, ganadora de cuatro Oscar, ensalza el papel de contrapoder de la prensa. "Cuarenta y cinco años después del Watergate, la verdad vuelve a estar en peligro", declaró Redford en el Washington Post en abril de 2017, comparando entonces el odio del presidente Trump hacia los periodistas con el de la administración de Nixon.
África mía (1985)
Clásico de clásicos, África mía consagró el mito de Redford, un indomable cazador del que se enamora Meryl Streep. Después de El gran Gatsby, el actor rubio de ojos azules profundos se convierte en el arquetipo de amante ideal, valiente y astuto, libre y romántico, con los grandiosos paisajes de la sabana keniana como telón de fondo. Nominada a 11 premios Oscar, esta adaptación de la autobiografía homónima de la escritora danesa Karen Blixen se lleva siete estatuillas y tres Globos de Oro. Es la sexta (de siete) colaboraciones del actor con Sydney Pollack.
Un ladrón con estilo (2018)
En su momento se vendió como una despedida de la pantalla para el veterano actor, pero aunque al final tuvo una última participación en una película en Avengers: Endgame, se puede contar a Un ladrón con estilo como su adiós. Esta película conmovedora y fresca a cargo del director David Lowery entregó uno de los mejores papeles de la madurez interpretativa de Redford. Basada en un artículo de prensa publicado en la New Yorker, Un ladrón con estilo —The old man and the gun, en su título original— cuenta la historia de un atracador de bancos que realiza sus golpes con una amabilidad extrema y que se convierte en una especie de símbolo. Un neo-western para salir con el corazón reconfortado y con un elenco que además incluye a Sissy Spacek y a Cassey Affleck.
El Observador y agencias