En las puertas de una nueva temporada turística, que se desarrollará entre diciembre de 2025 y febrero de 2026, un informe elaborado por el Centro de Investigaciones Económicas ( Cinve) proyecta que podría registrarse un leve descenso en el número total de visitantes respecto a la temporada anterior.
Sin embargo, el estudio destaca que, pese a la caída esperada en la llegada de turistas argentinos, el país lograría resultados similares a los del verano pasado, apoyado en un mayor flujo de visitantes brasileños y de uruguayos no residentes.
Según el informe al que accedió El Observador, los turistas de Argentina, Brasil y los uruguayos residentes en el exterior representaron, en la temporada anterior, más del 82% del total de visitantes. Para esta temporada se prevé que el conjunto de estos tres grupos experimente una reducción del 4%, impulsada fundamentalmente por la menor llegada de argentinos.
Argentina, el factor decisivo
La importancia del turismo argentino continúa siendo determinante para el desempeño del sector. Cinve señala que la relación de precios entre ambos países, junto con el enlentecimiento económico registrado en el país vecino durante el primer semestre de 2025, podrían frenar los planes de vacaciones en Uruguay.
De concretarse las proyecciones, la temporada 2025–2026 sería la cuarta en magnitud de visitantes argentinos desde 2016, superada por los veranos 2017–2018, 2016–2017 y el reciente 2024–2025. No obstante, el informe advierte que un escenario de precios más favorable podría mitigar la caída esperada y acercar el resultado a los niveles de la temporada pasada.
Brasileños y uruguayos no residentes: estabilidad y leve repunte
En contraste, se proyecta un aumento en la llegada de turistas brasileños, aunque todavía 13% por debajo del máximo alcanzado entre diciembre de 2023 y febrero de 2024.
En cuanto a los uruguayos no residentes, el informe indica que, luego del pico observado en noviembre de 2023 —cuando se registraron 90 mil ingresos—, el flujo ha descendido hacia niveles similares a los prepandemia.
Un verano con expectativas moderadamente optimistas
En suma, y pese a la caída prevista en el principal mercado emisor de turistas, la próxima temporada “podría repetir el éxito” del verano 2024–2025, apoyada en la mayor presencia de brasileños y uruguayos residentes en el exterior, concluye el reporte. El comportamiento del tipo de cambio y la competitividad de precios con Argentina volverán a ser variables cruciales para el resultado final.
En una línea similar, un informe divulgado días atrás por el Observatorio de la Coyuntura Económica de la Universidad Católica señala que la nueva temporada estival sería de magnitudes parecidas a la pasada, asumiendo que la actual relación bilateral de precios se mantendrá en los próximos meses.
Por otra parte, el economista de la consultora Exante, Luciano Magnífico, expresó en el programa En Perspectiva que el ingreso de visitantes y el gasto de estos turistas se ubicarían en la próxima temporada en niveles similares a los registrados el verano pasado, que resultó “muy bueno” en términos históricos.
“Nuestros modelos están apuntando a una cierta moderación en la llegada de turistas argentinos, en la medida en que en los meses más recientes el país vecino se ha abaratado en términos relativos, y esto podría continuar por algún tiempo más”, señaló. En ese sentido, explicó que, aunque ya hay una proporción de transacciones cerradas, será muy relevante seguir las novedades del frente cambiario.