El presidente de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), Álvaro Brunini, dijo este lunes que la suspensión de la oficina del organismo en Israel se debió a que era un "mal acuerdo" para Uruguay, y descartó que la agencia aludiera a motivos políticos.
En una entrevista con Informativo Sarandí (Radio Sarandí), Brunini recordó que la iniciativa de instalar una oficina en Jerusalén fue de Presidencia en el gobierno anterior, por un motivo "político", y no de los técnicos de la ANII, lo cual consideró "erróneo", y luego afirmó que "el acuerdo en sí es un mal acuerdo" porque "no es un acuerdo de cooperación".
"Hay una contratación de una serie de servicios, se contrata una oficina y una serie de cursos. No hay proyectos de investigación, proyectos científicos", continuó Brunini, y agregó que las instalaciones de Uruguay en Israel iban a ser "oficinas vacías", porque "no se le asignó un presupuesto".
"No vimos ningún proyecto concreto, en el plan operativo anual tampoco había ninguna línea de financiamiento para ese tipo de actividades, en una situación de la agencia que es sumamente deficitaria", remarcó el jerarca, quien advirtió que si la ANII "no recibe mayor presupuesto en el próximo año" no solo cerrará oficinas en el extranjero, sino que "va a tener que cerrar".
En ese marco, Brunini también consideró que "fue un error haber transferido los recursos antes de firmar un acuerdo específico" con la Universidad Hebrea de Jerusalén, ya que esto implica una "debilidad para modificar el acuerdo y las actividades previstas".
La administración anterior pagó 129.000 dólares por los servicios en Israel. Los costos abarcan el "alquiler de la oficina en sí, el coordinador de la Universidad de Jerusalén, un curso para estudiantes", que Brunini lamentó que está "limitado" porque la Udelar se opuso a la propuesta, por lo que solo sería para estudiantes de universidades privadas, además de "otro curso de emprendedores y funcionarios públicos, y una serie de cuatro talleres de intercambios de experiencias", en formato virtual.
El presidente de la ANII aseguró que la decisión de suspender el acuerdo "fue tomada en conjunto entre la agencia y el Poder Ejecutivo", cada uno con sus razones. En esa línea, Brunini aclaró que, a diferencia de lo que afirmó el canciller Mario Lubetkin, la agencia no tiene motivos políticos para congelar la iniciativa: "No nos corresponde analizar conflictos en el exterior".
Consultado sobre la renuncia del asesor Salomón Vilensky luego de criticar la suspensión del acuerdo y decir que Lubetkin era un "judío de mierda", Brunini dijo que el Consejo Asesor Honorario de la ANII está compuesto por cuatro personas y hubo "una renuncia". "Apostamos al diálogo en sentido amplio", sentenció.