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Caso Penadés: por qué la fiscal pidió el desafuero y qué estrategia busca en la investigación
El extenso escrito que incluye fundamentación jurídica, fragmentos de las declaraciones de las víctimas y algunos detalles escabrosos, cierra con un pedido concreto: que le remuevan los fueros al senador Gustavo Penadés. Ese pedido concreto tenía un objetivo concreto y más allá de que es probable que en un futuro la fiscal del caso, Alicia Ghione, pida la imputación del senador, su primera intención es asegurarse la declaración de las víctimas en juicio, según consta en el pedido de desafuero al que accedió El Observador.
"Una vez considerado por el Poder Legislativo el desafuero del senador Penadés, se fije urgente audiencia de prueba anticipada de declaración de las víctimas con reserva de sus identidades", sostuvo en el escrito.
¿Por qué toma esta decisión? Hasta el momento, las ocho víctimas declararon en fiscalía, pero esos testimonios no tienen ninguna validez en un juicio. Eso debe ser ratificado frente a un juez. Para que eso ocurra, Penadés debe estar libre de fueros parlamentarios, dado que deberá comparecer a audiencia en esa instancia.
Que el caso vaya a juicio oral es una de las tres opciones posibles. Las otras dos son que la investigación se archive o que se celebre un acuerdo abreviado. Esto último significa que el acusado asume la culpa y queda condenado a cambio de una rebaja de hasta un tercio de la pena.
Pero si estas dos últimas cosas no ocurren y el caso va a juicio oral, las víctimas deberían volver a declarar. Eso es improbable que ocurra antes de que se cumpla un año de la imputación de la persona. E incluso podría dilatarse aún más, dado que la fiscalía puede pedir la prórroga de un año más para investigar.
Mientras tanto, las víctimas pueden arrepentirse, sufrir temor o desistir de declarar por algún otro motivo. En los delitos sexuales, la declaración de las víctimas es una prueba de fundamental relevancia y no tenerla podría llevar a un gran debilitamiento del caso. Para no correr ese riesgo, la fiscal pide la declaración anticipada.
De esta forma, las víctimas prestan declaración ante un juez de garantías (no será el mismo juez que después tenga el juicio) en los próximos días. Eso se graba y después el juez de juicio oral podrá ver la grabación, sin necesidad de que las víctimas declaren nuevamente.
Las víctimas de explotación sexual declaran en otra sala y son interrogados por funcionarios judiciales, a diferencia de otras víctimas o testigos que son interrogados directamente por la fiscalía y los abogados. Las partes debaten el pliego de preguntas previamente y, luego, el funcionario, tan solo las transmite. Eso es transmitido en vivo a la sala principal donde lo miran el juez, fiscal y abogados.
Así fue en la Operación Océano, donde el juicio todavía no comenzó pero todas las víctimas ya prestaron declaración judicial hace más de un año.
Para la fiscalía, que se acepte el desafuero y Penadés comparezca a las declaraciones de las víctimas refuerza su "principio de inocencia" y "derecho al debido proceso", según consta en el escrito.
