Fútbol > EL ANÁLISIS
Con la impronta de Giordano, el fútbol de Neves y Trasante, y los goles de Bergessio, Nacional es completo
Sus gritos se escuchan a dos cuadras. Así vive el fútbol Jorge Giordano, con pasión como pocos. No por eso es mejor técnico, pero sabe de esto. Sabe cómo parar a un equipo y darle dinámica, cómo simular los jugadores que no están por lesión o por distintos motivos, y sobre todo, cómo motivarlos.
"¡Gabriel! ¡¡Vamos!!", le gritó a Neves en el primer tiempo contra Defensor Sporting cuando la clase de fútbol que después se iba a ver, aún no había comenzado y se veían los primeros compases.
Y Neves no se puso nervioso por ese grito. Al contrario. Asimiló. Jugó con un temple tremendo, movió los hilos del mediocampo y de a poco está encontrando a un compañero de lujo que vino desde Santa Lucía y que se recibió de arquitecto del gol este sábado a la noche con un misil tierra aire que se coló en el ángulo superior derecho de Bernardo Long. Ese es Joaquín Trasante.
Pero resumir solamente en ese, el que posiblemente sea elegido como el mejor gol del Torneo Intermedio al final del mismo, lo que mostró Trasante, sería subestimarlo.
Nacional además, en los últimos partidos ha mostrado que a sus rivales los pisa físicamente. Los pasa por arriba. Y por allí, también empieza ganando.
El fútbol es un estado de ánimo y este equipo lo sabe demostrar claramente. La tranquilidad con la que juega es notable. No importa que enfrente aparezca un rival de fuste como Defensor Sporting. Con la impronta que impone Giordano, sabe a lo que juega. Se podrá equivocar, pero no es infiel.
A la dupla Neves-Trasante, se le sumó Emiliano Martínez para redondear un medio juego muy superior al rival y desde donde comenzó a ganarse este nuevo compromiso.
Nacional mostró que tiene plantel de sobra. Ignacio Lores mostró un arranque espectacular con su zurda endiablada y la estampa de gran jugador. Fue uno de los más destacados de la cancha -siendo el mejor del período inicial- aunque perfectamente el árbitro Jonathan Fuentes pudo haberlo expulsado al inicio del complemento cuando se le fue la pierna sobre Andrés Lamas. El juez lo perdonó, pero Giordano no. Se dio cuenta de que se había salvado de la roja y lo sacó enseguida. Recién iban 4 minutos del segundo tiempo. De alguna manera, lo salvó.
Al enorme desempeño de los hombres del medio, hay que adosarle lo que hizo una defensa muy firme -al igual que su arquero Sergio Rochet- con Agustín Oliveros como estandarte. El Maestro Tabárez no se lo lleva a pasear a Barranquilla este domingo para juntarse con los demás futbolistas de la selección nacional. El zaguero demuestra un gran presente.
¿Qué decir entonces de Gonzalo Bergessio? Con sus 36 años a cuestas, le alcanzan algunos minutos en cancha para hacer la diferencia. Y esta vez, como ocurre usualmente, anotó el primer gol, el primero de tres golazos que hizo Nacional, con una media vuelta de ensueño pese a la marca pegajosa de dos experientes zagueros como Alejandro González y Andrés Lamas.
Así, el argentino llegó a 14 tantos para seguir siendo el goleador absoluto del Campeonato Uruguayo.
Mientras Alfonso Trezza e Ignacio Lores abrían las puntas a fuerza de velocidad y dinámica, Bergessio arrastraba marcas, se llevaba toda la atención. Tanto fue así, que al Tata González sus compañeros lo dejaron muy solo por el lateral derecho y por allí Nacional hacía la diferencia. Así de simple es el fútbol cuando se juntan el juego, el físico y el buen estado de ánimo.
La frutilla en la torta para ver mayor ritmo aún, se vio al promediar el segundo tiempo cuando ingresó Felipe Carballo. Ese es un lujo que se da Giordano con un banco realmente envidiable para otros clubes.
Porque, por ejemplo, no tuvo en cuenta a Rodrigo Amaral. Tampoco a uno de los más queridos de la hinchada tricolor que volvió para ser campeón: Rafa García. ¿Y Sebastián Fernández? Tampoco tuvo minutos. ¿Y el experiente volante argentino Claudio Yacob y su fútbol? Se quedó afuera y esta vez, no le tocó ingresar.
Nadie se acordó que el Chory Castro hace algunos partidos que no juega por lesión. Es más: aún no pudo debutar con Giordano. Y nadie puede discutir la influencia que tiene sobre sus compañeros y en este equipo. Sin embargo, no juega y no pasa nada. Hay un suplente que cumple su función a rajatabla. ¿Y Santiago Rodríguez? No estuvo y eso que siempre da una mano importante.
Otro que tuvo un tremendo arranque luego del parate por la pandemia fue Pablo García. Tampoco juega y su ausencia pasa inadvertida.
Los partidos pasan y Nacional sigue sacando ventajas. Líder en el grupo B de este Torneo Intermedio, aprovechó el empate del viernes entre Rentistas y Cerro Largo y sacó aún más diferencia en la Tabla Anual, de siete y seis unidades, respectivamente.
Con los gritos de Giordano, con la tranquilidad de sus jugadores, con el fútbol que se necesita para ser el mejor.
