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El gobierno de Panamá anuncia el desbloqueo total de las rutas por primera vez en tres semanas
Las rutas que estuvieron bloqueadas por tres semanas en Panamá en protesta por el encarecimiento del costo de vida fueron liberadas en las últimas horas por los manifestantes, mientras siguen las negociaciones entre los gremios y el gobierno.
El ministro de Seguridad, Juan Manuel Pino, aseguró que las rutas están “todas abiertas” por primera vez desde que se iniciaron las protestas hace tres semanas, incluida la Panamericana.
Poco antes, la Policía anunció en su cuenta de Twitter que "las vías que se mantenían con cierre por manifestaciones se encuentran despejadas" y con "flujo vehicular constante", informó la agencia AFP.
Panamá lleva varias semanas sacudido por las protestas populares contra el encarecimiento del costo de vida y la corrupción, en la peor crisis social desde la invasión estadounidense de 1989.
Desde entonces los manifestantes mantenían bloqueados los caminos afectando especialmente la circulación por la autopista Panamericana, que conecta Panamá con Costa Rica, y es la principal ruta para el tráfico de mercaderías.
El martes, líderes de la comarca indígena Ngäbe-Buglé, al oeste del país, ya habían anunciado que dejarían de bloquear la Panamericana en la provincia de Chiriquí, donde se produce la mayoría de alimentos frescos que se consumen en el país.
El despeje de las rutas en esa región significaría una sustancial mejora para el abastecimiento de productos alimenticios en los centros urbanos, ya que la escasez de comestibles se convirtió en una de las notas salientes de esta crisis.
En Santiago de Veraguas, 250 kilómetros al suroeste de Ciudad de Panamá, epicentro de las protestas más radicales, la policía evitó el cierre de la Panamericana, según imágenes publicadas en redes sociales.
El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, reiteró a los manifestantes que reabrieran las vías y advirtió que sancionará a quienes atenten contra la seguridad, durante un mensaje en el que apareció rodeado de ministros.
"Las protestas, cierres de calles y carreteras nos afectan a todos, ponen en riesgo la salud y vida de los panameños, también encarecen el costo de los alimentos y atentan contra el empleo", dijo.
Afirmó que el Gobierno "respeta el derecho a manifestarse", pero "sin alteraciones del orden público, violación de los derechos a terceros y mucho menos actos de vandalismo", agregó.
La apertura de las vías se produce en medio del diálogo que se lleva a cabo desde mediados de la semana pasada, en Penonomé, 150 kilómetros al suroeste de la capital panameña. Del mismo participan el gobierno con representantes de las organizaciones que convocaron las protestas.
Hasta la fecha, el Gobierno acordó reducir y poner precios máximos a 72 artículos de la canasta básica y rebajar el combustible de 5,20 dólares por galón (3,78 litros) a 3,25 dólares.
Sin embargo, los gremios insisten que se baje el precio de la nafta a 3 dólares, así como bajar el costo de medicamentos y electricidad.
Junto a esas reivindicaciones económicas, hay otras demandas más de fondo, como mejorar la salud y educación públicas e implementar medidas contra la corrupción.
