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Empresas de la industria avícola piden crear un GACH para gripe aviar
La Cámara Uruguaya de Procesadores Avícolas (Cupra) le envió una carta al ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), expresando su preocupación por la situación de la gripe aviar y reclamando contar con información actualizada en tiempo real sobre el proceso de vigilancia de la enfermedad, así como además, solicitando que se involucre al ámbito científico en dicho control.
El gobierno dispuso realizar la vacunación preventiva contra gripe aviar, de gallinas ponedoras y de reproductoras –las que generan los pollitos y luego se destinan a la producción de carne aviar o a la de huevos–, tras considerar que “hay una circulación viral en varios departamentos”, dijo el ministro Fernando Mattos.
Para la campaña de vacunación se importarán 10 millones de dosis, de dos tipos, una inoculada y otra vectorizada, desde México y Francia. Cada ejemplar recibirá una dosis doble.
Ante esa disposición, Cupra expresó que la vacunación se debe acompañar “con otras medidas complementarias, para no poner en riesgo el proyecto de modernización del rubro, sus expectativas de exportación, ni generar situaciones ambiguas a los productores”.
Problemas de informalidad y bioseguridad
Una de las medidas complementarias que planteó la gremial, que nuclea a las principales empresas de la industria avícola nacional, fue crear una entidad similar al Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) o involucrar a los científicos mediante la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), “para enriquecer el conocimiento y seguir la evolución de la epidemia global, asesorando a los actores públicos y privados”.
Los industriales reclamaron que el gobierno dedique “los mayores esfuerzos para resolver los problemas de informalidad y bioseguridad asociados en un amplio número de granjas de postura”.
Desde la gremial destacaron el proyecto de exportación de carne aviar a mercados como China, Hong Kong, Arabia Saudita, Sudáfrica, Estados Unidos, Chile y la Unión Europea impulsado en 2021, que implica aumentar 70% la producción del sector, lo que llevaría a crear 2.500 empleos directos adicionales y una exportación de US$ 65 millones.
“La avicultura nacional requiere que el país invierta como lo hizo y lo hace para la carne bovina, en el desarrollo de conocimiento y en el aporte de los mejores científicos con que podamos contar para que demos pasos firmes y seguros en la estrategia de desarrollo del sector acordada con el gobierno”, dijo el presidente de CUPRA, Domingo Estévez, quien destacó que el escenario sanitario mundial se caracteriza “por la incertidumbre y la exigencia de calidad”.
