A la ingeniera agrónoma Luisina Torres –de 28 años– el gusto por el campo le corre por las venas. Es hija de maestros rurales y nieta de productores lecheros, se crió yendo de las escuelas rurales en Rosario (Colonia) a la casa de sus abuelos paternos, en campaña, donde su abuela –apodada “la jefa”– le enseñó muchas de las cosas que hoy pone en práctica en su profesión. Le gusta la producción ganadera y está segura de que quiere que su futuro transcurra en el campo.
Esta nota es exclusiva para suscriptores.
Accedé ahora y sin límites a toda la información.
¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá