El batero colocó los platillos y se acomodó en su silla, el bajista afinó su bajo y un utilero pegó en el piso del escenario del Montevideo Music Box la lista de canciones. Llegaron a verlo desde La Floresta, La Paloma, y Rivera. En total eran unos 400 los que esperaban para ver salir a Agustín "Radagast" Aristarán.
“¡Nants ingonyama bagithi baba!”, la introducción de Circle of life de la película El Rey León fue su presentación. Hizo una pausa antes de terminar y miró al público con complicidad. La gente se rió y aprobó la actitud del cantante quien retomó la canción entre risas. Quienes estaban en el lugar sabían que la banda Soy Rada and the Colibriquis, que tiene dos discos grabados y presentaciones internacionales, es liderada por Aristarán, quien además de cantar y tocar el ukelele hace stand up, es mago e influencer en Instagram -donde hace videos graciosos para su más de un millón de seguidores- y para sorpresa, desde hace poco también es la hiena de El Rey León.
“Por suerte siempre me apoyan en lo que hago. En algunas cosas más, en otras que son más nuevas, menos” dijo el cantante al público antes de cantar la última canción del espectáculo.
La banda se fundó en 2018, pero sus proyectos artísticos empezaron mucho antes. A los doce años decidió hacer shows de magia y cursos de comedia. Al tiempo aprendió malabares y trabajó en los semáforos de Bahía Blanca, su ciudad natal. En su juventud viajó a Buenos Aires donde hizo cursos de clown, pantomima, stand-up y creó un espectáculo que mezclaba magia con comedia y música. Por el 2016, con 33 años, empezó a hacer con frecuencia videos humorísticos en Instagram, sin demasiada producción y por lo general con situaciones de la vida cotidiana junto a su hija Bianca o a su novia, la actriz Fernanda Metilli.
La red social popularizó su imagen y se convirtió en uno de los influencers más grande de Argentina, con más de 1,3 millones de seguidores en Instagram. Aristarán dijo a El Observador que en los contenidos de su cuenta hay mucho de su esencia, pero aseguró que no son un reality de su vida. “No estoy así las 24 horas. Sería patológico para mi entorno, sobre todo para mi hija”, bromeó el artista.
Para Aristarán las publicaciones de su Instagram son un trabajo más. Le dedica entre dos y tres horas diarias y dijo que esos videos humorísticos de un minuto mantienen sus proyectos. Cree que es la forma de simpatizarle a la gente para que lo vayan a ver en otros espacios y en otras de sus facetas artísticas.
Este año Disney lo convocó para hacer el doblaje a castellano del personaje Karami, una de las hienas del remake fotorrealista de El Rey León. Para él la experiencia fue un “flash” que le significó un aprendizaje increíble para su carrera.
Participó de un especial de stand-up en Netflix y actuó en la película Re Loca, también trabajó en televisión pero no se sintió cómodo con este medio de comunicación. “Me gustan las plataformas más democráticas que podés ver las cosas como quieras y cuando quieras”, aseguró el artista; quien además de la banda musical, es el conductor de Radahouse, un programa de entrevistas con personajes famosos -por allí pasaron, entre otros, el basquetbolista Emanuel Ginóbili y el periodista Mario Pergolini-. Grabado en su casa y publicado en Youtube, el programa tiene un plan muy relajado, dijo Aristarán, quien aseguró que allí se muestra la dinámica de su hogar, donde siempre hay “gente de paso” y muchos artistas amigos que lo visitan.
Con Serendipia, su show teatral, mezcló stand-up, magia y música y el 15 de noviembre cerró la obra con una función en el Teatro Gran Rex de Argentina. Según él, en Serendipia muestra y cuenta mucho más de su vida que en las redes sociales.
Prometió presentarlo en Uruguay para el 2020. Dijo que en el público uruguayo es "una masa" y reconoció que todos los argentinos quisieran ser uruguayos “por la onda, la tranquilidad y la cordialidad que existe”.
Estaba por finalizar su recital en el Montevideo Music Box y halagó una cartulina amarilla que tenía escrito su nombre y una frase de agradecimiento. Las dueñas del cartel querían una foto con él, pero no escuchaba lo que decían. Les pidió que se arrimaran al escenario, se agachó lo más que pudo y le pidió el celular a una de ellas; cuando se lo dieron cambió la cámara a foto frontal y se estiró un poco más para salir con ellas en la selfie.
Aristarán dijo que recibe muchísimos mensajes a diario en sus redes sociales. Lee la mayor cantidad posible pero afirmó que no contesta ni el diez por ciento por temas de tiempo. Sus fotos y videos tienen miles de comentarios y solo a veces se detiene a responder los “mala onda”. “Cuando hay un hater, en realidad me da cosa por él porque está enojado por otras cosas y se la agarra conmigo”, dijo el artista, quien aseguró que no le afectan los comentarios negativos, salvo cuando es algo muy agresivo o agreden a gente que quiere.
Luego de su función en el Gran Rex se irá de vacaciones al otro día. Fiel a su proactividad, para el próximo año tiene como proyecto la creación de una serie, una película y una obra nueva.
Su carrera varió con el tiempo. La palabra “éxito” la considera vacía y para él, no se trata de llegar a ningún lado, ni de ser famoso, ni de “tener guita”. “Siempre disfruté el camino y lo importante es ser consciente de que sos y te sentís feliz”, concluyó.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá