Renunció el fiscal de Corte, Jorge Díaz

"Esta decisión estaba tomada a fines del año pasado, la iba a comunicar a fines del año pasado pero renunciar en ese momento hubiera sido un acto de deslealtad institucional porque no había fiscal adjunto y no podíamos tener a alguien que realizara la transición", aseguró.

Ahora quien se desempeña como fiscal adjunto es Juan Gómez, que será quien quede en el cargo de fiscal general hasta abril de 2022 o hasta que se designe un reemplazo. 

"El ciclo está cumplido, las tareas asignadas han sido cumplidas, y en definitiva es hora de cerrar este ciclo", aseguró y agregó que se reunió esta mañana con el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, y le comunicó la decisión de irse. "Han sido 26 años de servicio público y es hora de que le dedique toda esa energía a trabajar en proyectos en la actividad privada que me ilusionan y me entusiasman", comunicó.

"Mi primer proyecto va a ser descansar. Llegar a mi casa, apagar el celular. Hoy se termina mi vida en el servicio público y paso a ser un ciudadano común y corriente. Obviamente este país es muy chico y más adelante nos seguiremos encontrando", agregó.

Díaz aseguró que la reunión con el presidente fue cordial y hablaron de "diferentes temas de la administración de la Justicia e incluso de temas personales". "Fue una reunión de más de una hora en donde le expliqué que en el día de hoy iba a comunicar (la renuncia) a mi gente, a los integrantes de esta institución y que luego iba a hacer una conferencia de prensa y comunicarlo públicamente". 

"Asumí como fiscal de corte el 17 de abril del año 2012, designado el Poder Ejecutivo y con venia otorgada por unanimidad", comenzó diciendo. Contó que antes de su designación, se había reunido con representantes de todos los partidos con presencia parlamentaria de la época y planteó que la Fiscalía debía ser "autónoma" y dejar de ser una unidad ejecutora del Ministerio de Educación y Cultura.

"Sin esa reubicación institucional era imposible avanzar en el camino de la reforma", aseguró. Díaz afirmó que se presentaron "muchos recursos de inconstitucionalidad a la Suprema Corte de Justicia" para impedir la creación de la Fiscalía como órgano descentralizado pero que ninguno prosperó. 

Asimismo, dijo que también cumplió el objetivo de que la Fiscalía se encargara exclusivamente de la investigación y persecución criminal. "Hoy de las 102 fiscalías que tiene el país, 101 trabajan en materia penal y solamente una lo hace en materia civil y de aduanas. De los 344 fiscales, 342 trabajan en la materia penal", señaló.

Por último, señaló que su objetivo más importante fue la reforma del Código de Proceso Penal que se convirtió en un "sistema mucho más eficaz y garantista que el anterior en el que se obtienen mejores resultados de investigación y persecución". "Ese fue el desafió central y el leitmotiv de mi asunción como fiscal de Corte", agregó.

"En cuatro años creció el número de denuncias aclaradas, el número de personas imputadas, el número de imputaciones, la cantidad de condenas obtenidas, se mejoró sustancialmente el porcentaje de delitos aclarados sobre los denunciados", enumeró. "Al momento de realizar la reforma había 11 mil personas privadas de libertad y solamente el 30% tenía sentencia condenatoria. Hoy el 84% tiene sentencia y solamente el 16% tiene medidas cautelares", confirmó.

"Los hechos destruyeron el relato que se instaló de algunos sectores de que este era un código prodelincuente, que ataba de manos a la policía y que aumentaba la inseguridad", apuntó.

El cargo de Díaz vencía en abril de 2022 y su nombre era uno de los que se manejaban en el Parlamento para ingresar a la Suprema Corte de Justicia. Sin embargo, no contaba con el respaldo de Cabildo Abierto ni tampoco de algunos legisladores nacionalistas. 

Cabildo Abierto, incluso, había pedido su renuncia a mediados de 2020 mediante una carta que el senador Guillermo Domenech y el diputado Eduardo Lust presentaron en Torre Ejecutiva.