Una gala con bandoneón

Con una mezcla de tango moderno y tradicional, el bandoneonista uruguayo Raúl Jaurena y su ensamble musicalizarán la pieza Encuentros, con coreografía de Marina Sánchez, que el Ballet Nacional del Sodre (BNS) estrena este jueves en la Gala VI. El espectáculo también incluye Theme and variations, de George Balanchine con música de Piotr Ilich Chaikovski, y Chacona, de Goyo Montero con música de Johann Sebastian Bach.

El reconocido bandoneonista, ganador del Grammy Latino por su disco Te amo tango en 2007, ya había participado en la Gala por los 100 años de La Cumparsita el pasado abril junto al BNS.

Jaurena modificó un cronograma que lo llevaría a Jerusalén para poder estar en la Gala VI del BNS, ya que, según sus propias palabras, disfruta "sentirse en casa".

El espectáculo contará con la Orquesta Sinfónica del Sodre en la pieza Theme and variations, además de los músicos invitados Matías Craciun, Guzmán Mendaro y Esteban Urtiaga en Chacona, y el Cuarteto Jaurena para Encuentros.

Pensando en las giras internacionales, la coreógrafa urguaya formada en el Sodre Marina Sánchez creó esta última pieza para incluir en el repertorio de la compañía estatal un trabajo original con identidad rioplatense.

"Pasaba que hacíamos grandes coreografías de otros países y siempre me quedaba la sensación de que estábamos recorriendo el mundo y no había algo que mostrara a Uruguay", dijo Sánchez a El Observador. "Esto es Uruguay, esto es Río de la Plata", agregó, en referencia a la pieza que estrena hoy y será parte de la gira nacional del BNS prevista para octubre.

En puntas, pero definido por su autora como una fusión tango-ballet, la pieza mostrará a 18 bailarines vistiendo pantalón negro y camisa blanca, indumentaria representativa del tango, en busca de borrar los códigos de género en el vestuario.

"La parte de la mujer y del hombre va a estar definida por la danza, los movimientos, la sensualidad", expresó la coreógrafa.

La música será una mezcla de compositores con base uruguaya, como Gerardo Matos Rodríguez, y los argentinos Juan Carlos Cobián, Mariano Mores, y Astor Piazzolla.

Jaurena hizo todos los arreglos de los tangos para el espectáculo. "Estoy abierto a todas las expresiones de tango de distinta índole. Como en este caso: el ballet. Uno está acostumbrado a ver el tango con los milongueros, y el ballet es algo totalmente diferente", dijo el bandoneonista.

Carrera en el exterior

Jaurena llega de una gira por Alemania y otra por China, donde, asegura, el ritmo rioplatense agota entradas.

"El tango abre puertas y acá en el Río de la Plata, especialmente en Uruguay, no es nada popular. El uruguayo ha bajado los brazos y le ha dado el patrimonio del tango a la Argentina", dijo el músico.

Mientras vive en Nueva York, Jaurena se compromete con la formación de nuevos bandoneonistas y músicos uruguayos con la Orquesta escuela Destaoriya, que cumple 10 años. Así busca mantener vivo el espíritu del tango local más allá de La Cumparsita y los sucesivos homenajes en el año de su aniversario.

"Pero no hay una nueva generación acá, estamos tratando de que salgan bandoneonistas", dijo el músico sobre la orquesta escuela.

Si bien Jaurena se acercó de niño al bandoneón porque su abuelo lo tocaba, asume que es un instrumento difícil. Destaca, sin embargo, que sus cualidades musicales únicas le dan la identidad al 2x4.

"Todos los días descubro sonidos y efectos nuevos del bandoneón. Me salgo absolutamente de todo, tengo una comunicación con él. Entre su sonido y la presión mayor o menor que yo le pueda hacer, pasamos a ser uno solo", expresó Jaurena.

El músico contó que comenzará la grabación de un nuevo disco en Nueva York con una big band de instrumentos no tradicionales para el tango: saxos, trombones y trompetas.

A futuro, el bandoneonista planea protagonizar el primer homenaje a La Cumparsita en el exterior, con un concierto en la Trinity Church de Nueva York en un evento organizado por el consulado uruguayo. l