En América Latina existen actualmente 1.316 startups basadas en ciencia y tecnología, de las cuales 21 tienen sede en Uruguay. De estas, el 67% se especializa en biotecnología.
Esta cifra, según el informe Deep Tech Radar Latam 2025 —elaborado por la consultora brasileña Emerge en alianza con Cubo Itaú—, coloca a Uruguay entre los países con mayor cantidad de empresas deep tech de la región y lo consolida como un “hub de nicho enfocado en salud y biociencias”.
“Uruguay se posiciona como un hub en biociencias y salud, demostrando que, aunque Brasil sea el líder en número de startups (952), América Latina en su conjunto se está convirtiendo en un terreno fértil para la innovación tecnológica avanzada”, sostiene la publicación.
Sin embargo, el informe señala también que Uruguay aún presenta un volumen incipiente de inversiones, con US$ 10,8 millones movilizados, frente a los líderes regionales Chile (US$607 millones), Argentina (US$486 millones) y Brasil (US$216 millones).
“El crecimiento de un ecosistema de deep tech no depende únicamente de la producción científica y de la protección intelectual, sino también de la capacidad de atraer capital y convertirlo en startups. Colombia, Uruguay y Costa Rica muestran una presencia aún limitada, lo que refuerza la necesidad de una mayor articulación entre producción científica, disponibilidad de capital y ambiente emprendedor”, detalla el informe.
En este sentido el informe sugiere impulsar el ecosistema mediante varias estrategias.
Una de ellas es aumentar y atraer talento a través de programas de posgrado, centros de investigación e incentivos para científicos internacionales, así como fortalecer la formación de doctores emprendedores y su vinculación con la industria.
Por otro lado, el documento sugiere implementar fondos escalables, reembolsables y no reembolsables que estimulen la inversión privada y promover la atracción de capital global mediante convenios de coinversión.
Por último, destaca la importancia de utilizar las compras públicas como palanca de desarrollo. En esta línea, recomienda crear programas de compras públicas de innovación, incentivando la adopción de nuevas tecnologías por parte del gobierno y facilitando el acceso de pymes y proyectos globales.
En toda América Latina se registran 1.316 deep techs, con Brasil a la cabeza (952), seguido por Argentina (145), Chile (72) y Uruguay (21). En conjunto, Brasil, Argentina, México, Chile, Colombia y Uruguay concentran el 97,8% del ecosistema regional.
De las deep tech analizadas a nivel regional, cerca del 35% opera con equipos de 6 a 10 personas y el grupo que cuenta con equipos de entre 11 y 50 personas ya representa el 37% del total. Este dato indica que una parte importante ya cuenta con cierta madurez y tracción como startup, dejando de depender únicamente de los fundadores.