Lo que importa
El Directorio del Banco Central del Uruguay (BCU), resolvió este martes por unanimidad recortar la tasa de interés en 50 puntos básicos, desde 8,75% a 8,25 %. Con ello se modera el sesgo contractivo de la política monetaria y transita gradualmente hacia la instancia neutral.
Para adoptar la decisión, el Copom valoró el comportamiento de la inflación, sus perspectivas y el descenso sostenido de las expectativas a dos años.
Contexto
Es el tercer recorte consecutivo de tasa de interés que dispone la autoridad monetaria, tras los registrados en julio y agosto pasado.
- Durante el trimestre, la inflación continuó su desaceleración en la mayoría de sus componentes. En tanto, la inflación núcleo mantuvo su descenso y se ubicó en 5%.
- “La credibilidad de la política monetaria se consolida”, dice el comunicado de la reunión.
- En setiembre se destacó la reducción de las expectativas de inflación empresariales a 5,5%, que ingresaron por primera vez al rango de tolerancia de entre 3% y 6%.
A esto se suman los analistas, que bajaron sus expectativas a 4,6%, prácticamente en la meta, y los mercados financieros, que descendieron a 4,75%.
"De esta forma, el promedio general (de expectativas) se ubicó en 4,95%, mostrando una reducción sostenida desde febrero y alcanzando su mínimo histórico”, agrega el texto.
- Por otro lado, el BCU señaló que las proyecciones de actividad económica para el horizonte de política monetaria (HPM) fueron revisadas levemente a la baja a causa de la situación regional, pero aun creciendo en torno a su potencial.
“En ese marco, la inflación evolucionará ligeramente por debajo de lo previsto en el trimestre anterior, pero convergiendo a la meta en el HPM", dice el texto.
Tasas y política monetaria
Una de las finalidades del Banco Central es la estabilidad de precios, como forma de preservar el valor de la moneda, o sea la capacidad de compra del peso uruguayo.
La actual política monetaria en Uruguay es un esquema de metas de inflación basado en tasas de interés. La variable principal de referencia es la tasa del mercado de dinero interbancario (tasa call) a un día de plazo.
La política monetaria busca que esta tasa transmita su señal al resto de las tasas de interés de la economía consistente con el objetivo de inflación. Es decir, termina incidiendo en el costo del dinero de los eslabones de la economía doméstica.