El proyecto de ley de Presupuesto a estudio del Parlamento introduce modificaciones en el régimen de importación de vehículos clásicos con una antigüedad igual o mayor a 50 años.
La normativa actual –vigente desde 2022– establece que la importación definitiva está exonerada de todos los gravámenes aduaneros que se abonan al momento de ingreso al territorio, y además prohíbe la enajenación de dichos vehículos dentro del territorio nacional.
Ahora, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), plantea que la importación solo podrá ser realizada por personas físicas y de acuerdo a los términos y condiciones que establezca la reglamentación.
Asimismo, los vehículos no podrán ser enajenados a título oneroso o gratuito, transferidos, prendados ni embargados por el término de cinco años de haber sido importados.
Una vez cumplidos los cincos años, si sus propietarios quisieran enajenarlos, podrán hacerlo, con previa aprobación del MEF, y pagando las cargas fiscales y aduaneras de las que se hubiera eximido a la importación original.
Los motivos de los cambios propuestos
El director de Asesoría Política Comercial del MEF, Juan Labraga, afirmó en el Parlamento que existe conformidad con el régimen creado en la ley de Rendición de Cuentas de 2021, porque ha sido un “éxito”.
“En la Asesoría Política Comercial somos quienes autorizamos este régimen y llevamos en estos cuatro años más de mil autos importados, lo que ha dado trabajo a chapistas, talleristas, etcétera”, dijo el funcionario. De todas formas, señaló que se busca hacer cambios para “potenciar este régimen”.
“Tal como quedó la redacción original, lo pueden usar tanto personas físicas como personas jurídicas y, como nosotros no estamos permitiendo la enajenación después, la trazabilidad para no permitir la venta con personas jurídicas se nos complica", expresó.
"En redes sociales se ofrecen en venta autos clásicos y nosotros estamos recibiendo bastantes pedidos de SAS queriendo importar autos clásicos. Por ley no les podemos decir que no, pero creemos que no fue el espíritu. Entonces, una de las modificaciones que estamos proponiendo es que la importación del auto clásico la puedan realizar solo personas físicas”, afirmó Labraga en la Comisión de Presupuesto Integrada con Hacienda de la Cámara de Diputados.
Por otro lado, afirmó que con más de 1.000 autos de este tipo en el país, se tiene que habilitar la enajenación.
La redacción original incluida en el proyecto de Presupuesto habilitaba esa posibilidad a los cinco años, pagando una alícuota de 23% sobre el valor de la factura o declaración de valor de la mercadería. Según Labraga, hubo “ruido” respecto a que se trataba de una medida recaudatoria por parte del gobierno, cuando lo que se buscaba era permitir la venta posterior.
“Así que, para sacar ese ruido, la importación va a quedar como en el régimen del 2021, y lo que vamos a proponer es que luego de cinco años el auto se pueda enajenar, pero pagando todo lo que debería pagar, tal como está hoy el régimen de importación de automóviles para lisiados o para uruguayos que retornan”, expresó, según la versión taquigráfica a la que accedió El Observador.
Uruguay en el mapa mundial
La importación de este tipo de vehículos busca dinamizar actividades intensivas en empleo y que se generen “externalidades positivas” hacia otros sectores de la economía, según el decreto vigente.
La actividad genera, además de puestos de trabajo en el sector, muchos empleos en otros sectores de la economía necesarios para el mantenimiento y conservaciones de los vehículos clásicos.
Además, se considera que la exhibición de bienes antiguos, y en especial los automóviles, es una actividad “muy relevante” desde el punto de vista cultural, y como tal se realiza en las principales capitales del mundo, con un crecimiento sostenido en los últimos años. Por eso “resulta importante posicionar a Uruguay en el mapa mundial de exposiciones de automóviles clásicos”.
Una nota publicada por Forbes Uruguay en 2024 daba cuenta que en el país había alrededor de 1.400 autos clásicos empadronados, según datos del Sistema Único de Cobro de Ingresos Vehiculares. Las intendencias tienen registros de empadronamientos de este tipo de vehículos desde 1995.