Sin embargo, dijo que los futbolistas uruguayos "son firmes para marcar, pero si tú te dedicas a jugar y no te cagas, llega el final del partido y te extienden la mano. Siento una admiración muy grande por los uruguayos, porque yo jugué en Europa, en Asia, en otros países de América y no vi gente tan frontal y parecida a la de mi tierra Río Grande del Sur".
Hoy Cassiano tiene 40 años y es representante de jugadores. "Es difícil abandonar el fútbol; es lo único que conocemos", admitió. Cuando llegó a Nacional tenía 27 y una trayectoria que incluía Gremio, Palmeiras, Logroñés, San Pablo y Toros Neza, entre otros. "Firmé por cinco meses, pero en realidad fueron tres; el primero me estaba recuperando de una operación y en diciembre no se juega. Pero si pienso que fuimos campeones del Apertura, del Uruguayo y llegamos a la semifinal de la Sudamericana, fue un pasaje muy positivo. Jugar en Nacional es un regalo para cualquiera".
Se acuerda con precisión que disputó 15 partidos, marcó seis goles y brindó cinco asistencias. Y pasó con creces el desafío que le planteó su padre cuando era un niño: "Desde chico yo jugaba al fútbol sala y me destacaba haciendo goles. Pero mi padre me decía, 'quiero ver cuando juegues contra los uruguayos'. Por eso cuando firmé con Nacional tenía esa motivación: demostrar que podía con la marca fuerte".
Para alguien que nació en Porto Alegre, enfrentar la rudeza de los adversarios no fue una dificultad: "Todos los que hacen el trabajo sucio en la selección de Brasil son de Porto Alegre, los artistas son de Río o de San Pablo".
Gaúcho es también Leo Gamalho, el centrodelantero que llegó a los tricolores para reemplazar a Iván Alonso. Cuando la negociación estaba avanzada, Gustavo Munúa llamó a Cassiano –fueron compañeros en 2002– para preguntarle sobre el delantero. "En el área hace daño y no se va a asustar por el contacto físico", dijo el actual representante de futbolistas.
Cassiano jugó en la Primera división de 10 países, además de Brasil (España, Rusia, Suiza, México, Uruguay, Corea del Sur, Portugal, Ecuador, Colombia y Vietnam). Las paredes de su oficina están adornadas con diarios de todos los lugares donde desplegó su clase. "Ahora tengo para mostrarles a mis hijas que jugué al fútbol. Mi mujer juntaba los diarios y yo le decía, '¿para qué vas a juntarlos?'. Pero con el tiempo uno se queda mayor y les da valor. Las mujeres siempre están un paso adelante", expresó.
El mismo año que jugó Cassiano en Nacional, también lo hizo Flavio Barros, un delantero que llegó como goleador del fútbol ecuatoriano. La imprevista contratación de Daniel Fonseca lo relegó. Otro atacante brasileño que pasó por los albos en los últimos tiempos fue Giancarlo, procedente de Novo Hamburgo. No dejó un buen recuerdo.
Tampoco rindieron Wesley, Bruno Coutinho, Carlão y Anderson. Jadson Viera, Marques y Caué ya jugaban en Uruguay cuando llegaron a Nacional. Y Pablo Valim fue un suspiro de verano. Ahora, la ilusión del Norte se llama Leo Gamalho.
ÚLTIMOS BRASILEÑOS ALBOS
Nombre
Flavio Barros 2002
Wesley Fernandes 2003
Giancarlo 2007
Bruno Coutinho 2007
Anderson 2011
Carlão 2011
Gabriel Marques 2011
Jadson Viera 2011/12
Caué Fernandes 2013/15
Pablo Valim 2015
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá