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Tabárez apuesta por un equipo más combativo y sólido para jugar contra Argentina
El pasado sábado 16 de setiembre las paredes del Complejo Uruguay Celeste fueron testigos mudas de una reunión que jamás se había dado con el Maestro Óscar Tabárez desde que se hizo cargo de la selección nacional por segunda oportunidad.
Por primera vez desde marzo de 2006, Tabárez fue, de alguna manera, interpelado por los neutrales de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) –sus empleadores– no solo por los malos resultados obtenidos en esa triple fecha de Eliminatorias para el Mundial de Catar 2022, sino, además, por la forma en que se perdieron los encuentros contra Argentina –el rival de este viernes a la hora 20 en el Estadio Campeón del Siglo– y Brasil.
Al otro día de aquella reunión en la que Tabárez tambaleó en su cargo, Referí informó que los integrantes del Comité Ejecutivo de la AUF, no le sugirieron estrategias de juego, tampoco cambios ni equipos, pero le advirtieron sobre la necesidad de ver a un Uruguay que “raspe” más en la mitad de la cancha, a la vez que pretendían una selección que exprese otra rebeldía en el campo.
Pues, por lo visto en la práctica a puertas cerradas que ordenó el miércoles el Maestro en medio de un fuerte viento en el Complejo, el DT celeste parece estar dándole la razón a los dirigentes.
Porque pensando en la revancha contra Argentina, paró un mediocampo más “raspador”.
Es cierto que no tiene a Federico Valverde –suspendido y lesionado–, y que pensando en la experiencia de sus jugadores, no tiene demasiado para sumar a esa zona fundamental del equipo.
De todas maneras, la intención a priori es jugar con un volante tapón delante de la línea de cuatro –y allí jugó Lucas Torreira en el entrenamiento– y otros cuatro mediocampistas por delante, dejando solo, rotando por todo el frente de ataque, a Luis Suárez.
Argentina tiene su punto fuerte en la mitad de la cancha, partiendo con Lionel Messi, pero a quien se le suman futbolistas que rinden de forma notable con el técnico Lionel Scaloni, como por ejemplo, Rodrigo De Paul, quien juega mucho más con la albiceleste en el pecho que cuando lo hace en su nuevo club, Atlético de Madrid.
También el volante de Tottenham Hotspur de Inglaterra, Giovanni Lo Celso, se suma para formar un tridente de mucho fútbol que genera cantidad de llegadas peligrosas –muchas veces, tocando de primera– al arco rival.
Con todo ese contexto, Tabárez tiene más claro que nadie –como ya lo tenía en el Monumental en el 3-0 pasado, pero jugando con otra clase de jugadores– que es ahí donde puede comenzar a ganarse el partido ante un adversario que lleva 25 encuentros invicto.
La táctica que preparó el Maestro en lo que mostró el miércoles, difiere respecto al equipo que jugó contra Argentina en Buenos Aires.
En aquel partido, Uruguay comenzó con línea de tres en el fondo –que se transformaba en una de cinco hombres cuando la atacaban– y ahora, por lo que mostró, serán cuatro los defensores.
Además, el Maestro se mostró muy activo y dentro de la cancha en la práctica, y la paró varias veces para dar nuevas indicaciones cuando pensaba que algo se podía mejorar.
Martín Cáceres fue probado en el equipo titular como lateral derecho y todo indica que allí jugará en el clásico de este viernes.
Esto lleva a que Nahitan Nández se sume a la línea de volantes. Otro futbolista que suma a esos “raspadores” que se le pidieron al Maestro.
Así, Uruguay con el mandato de Tabárez, tendrá un equipo más combativo, lo que no implica que tenga mayor volumen de juego ni creación.
Ese puede ser el gran debe en un partido que Uruguay debe ganar jugando en casa y más si se tiene en cuenta que su posición en la tabla se complicó para la clasificación directa a Catar 2022.
El Maestro probó con otra línea de cuatro con Nández, Vecino, Bentancur y Brian Rodríguez. Si bien este último es delantero, jugará al estilo de Edinson Cavani en varios encuentros de Tabárez con la celeste.
El gran tema será cómo le podrá llegar la pelota a Suárez, sobre todo, porque el Pelado Cáceres no tiene tanto desborde ni llegada por derecha como sucedió con Nández en un par de ocasiones en el Monumental cuando estaban 0-0 y el arquero Emiliano “Dibu” Martínez se transformó en figura para mantener el empate.
Nández como volante, podrá tener mayor profundidad por derecha, pero necesitará de la ayuda de Cáceres.
En ese contexto, ¿Tabárez se quedará con el equipo que probó el miércoles, o este jueves probará una segunda opción con Giovanni González en el lugar del Pelado?
Giovanni tiene mayor proyección que el jugador de Cagliari, aunque no tanta experiencia para un partido de estas características.
Todo indica que Cáceres será titular, algo que no ocurre desde el 0-0 en Caracas ante Venezuela en junio pasado. Pasaron 11 partidos desde ese momento.
El equipo de Tabárez es con Fernando Muslera; Martín Cáceres, José María Giménez, Diego Godín, Joaquín Piquerez; Lucas Torreira; Nahitan Nández, Matías Vecino, Rodrigo Bentancur, Brian Rodríguez y Luis Suárez.
Tabárez pidió a los neutrales que gestionaran ante la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) poder jugar este viernes, para tener un día más para trabajar con los futbolistas, algo que los neutrales le consiguieron.
Este jueves seguirá metiendo mano en el equipo titular, aunque todo indica que no habrá sorpresas y que estos 11 saldrán a jugarse todo en el clásico.
