Después de un regreso técnico al puerto de Montevideo, el buque científico Falkor (too) retomó su trabajo en la madrugada del miércoles. La misión forma parte de la campaña Uruguay Sub200, dedicada a explorar el fondo del mar uruguayo.
En esta nueva etapa, el robot submarino SuBastian realizó la inmersión número 829. Alcanzó una profundidad de 1.141 metros, en una zona del Cañón del Río de la Plata donde la temperatura es inferior a 3°C.
"¡Las primeras imágenes en 4K del fondo marino uruguayo! Voy a llorar y ya vuelvo", dijo un científico en tono de broma.
La inmersión se centró en observar la vida en aguas profundas, donde no llega la luz del sol y las condiciones son extremas. Allí, el equipo científico registró una gran variedad de organismos, muchos de los cuales no se ven fácilmente en otras partes del océano.
Uno de los hallazgos más destacados fueron los corales blancos, típicos de aguas frías y profundas. Estos corales no tienen color porque no dependen del sol como los de arrecifes tropicales.
También se vieron esponjas y corales solitarios, que viven enterrados en parte en el fondo marino. Entre ellos, se reconoció un tipo llamado Flabellum, que tiene forma de cono blanco.
Se registraron además estrellas de mar con formas poco comunes. Según contaron los científicos durante la transmisión, verlas vivas fue importante para el equipo, ya que muchas veces estos animales se estudian solo cuando están muertos o secos.
Una de las estrellas pertenece a una familia llamada Astropectinidae, que se reconoce por su forma y movimiento. También apareció un caracol marino del grupo Conoidea, un tipo de predador que puede tener veneno en sus glándulas.
Durante la exploración, el equipo observó organismos gelatinosos que estaban pegados a tubos. Podrían ser ctenóforos bentónicos, aunque falta confirmarlo. Estos animales se parecen a las medusas, pero no lo son. A diferencia de las medusas que flotan, los ctenóforos bentónicos viven pegados al fondo del mar.
Embed - Est. 3 Challenger 320 | SOI Divestream 829
La zona explorada tiene rocas formadas por sedimentos, es decir, capas de material acumulado en el fondo. Estas rocas tienen formas alargadas causadas por las corrientes submarinas, que van moldeando el paisaje con el tiempo.
La tercera estación de trabajo de Uruguay Sub200 permite seguir reuniendo imágenes y datos sobre cómo es el lecho marino uruguayo. Gran parte de este ecosistema sigue sin ser estudiado y cada inmersión aporta nueva información.
El robot SuBastian filma y toma muestras para su análisis. El material se revisa a bordo del Falkor y también se comparte en vivo, para que personas de todo el mundo puedan ver cómo es el trabajo científico en el océano.
Se prevén nuevas inmersiones en los próximos días.