Luego de que el martes se encontrara un ejemplar de la araña del banano en el departamento de Treinta y Tres, este jueves apareció uno de esos arácnidos en un comercio en la zona del Buceo, en Montevideo.
La toxicóloga del Hospital de Clínicas, Carolina Juanena, explicó a Subrayado (Canal 10) que esta araña forma parte de las cuatro especies peligrosas que habitan Uruguay.
"No es una araña autóctona de nuestro país sino que viene viajando, en general, desde Brasil, en las bananas. Tiene la característica de ser agresiva. Cuando se siente atacada o cuando va a atacar levanta las dos patas delanteras y se pone en una postura muy característica de defensa que la identifica de otras arañas, en general no agresivas de nuestro país," detalló la experta.
Ante la presencia de este insecto, Juanena recomendó no molestarla. "El dolor que genera la mordedura es muy intenso, las picaduras más frecuentes son en los miembros. Se pueden apreciar dos puntitos, coloración roja e hinchazón," explicó.
Además, la toxicóloga destacó que el dolor comienza a recorrer el miembro afectado, pudiendo llegar hasta la axila o la raíz del muslo, acompañado de un hormigueo. "El dolor intenso es solo un cuadro leve; si eso avanza, el cuadro clínico puede incluir síntomas más generales, como vómitos, malestar, visión borrosa y sensación de agitación o nerviosismo," indicó.
Si bien los síntomas aparecen rápidamente después de la mordedura, Juanena puntualizó que los casos en niños son más graves, al igual que en adultos mayores. Sin embargo, no se han registrado incidentes de mordeduras en Uruguay hasta el momento.
La toxicóloga también explicó que existe la hipótesis de que el veneno de la araña podría ser menos activo en el país debido a las diferencias climáticas, además de los cambios biológicos que la araña experimenta durante su viaje.
El hallazgo de este ejemplar subraya la importancia de la prevención y el conocimiento sobre las especies peligrosas que pueden llegar al país, especialmente en un contexto donde los envíos de frutas tropicales continúan siendo una vía común para la introducción de estos animales.
Tal como explica esta nota de El Observador, ya hay una decena de registros en Uruguay. Aunque desde los años 90 se han documentado mordeduras, no se han registrado casos graves. Estas arañas, del género Phoneutria, no son autóctonas y llegaron al país principalmente en cargamentos de bananas o en el alije de barcos.
En 1988, un trabajo científico sugirió dejar de importar bananas en cachos para evitar la llegada de estos arácnidos, pero las arañas del banano siguen apareciendo, incluso tras el cambio en el transporte. Entre 1994 y 1997, se recibieron solo tres consultas por mordeduras, lo que representa apenas un 2% del total por picaduras de arácnidos.
Varios casos se han registrado, como uno en 2012 en la isla del Zapallo, donde un hombre fue mordido mientras levantaba leña, pero sin consecuencias graves. Otro caso, en 2019, involucró a un empleado de supermercado en Treinta y Tres, quien fue mordido mientras manipulaba una caja de bananas. En 2023, un verdulero en Montevideo fue mordido y atendido sin problemas graves.
A pesar de la peligrosidad del veneno, los casos en Uruguay no han alcanzado la gravedad observada en otros países. Los expertos sugieren que el veneno podría ser menos activo debido al estrés del transporte. Además, los afectados en Uruguay han sido adultos sanos, y el veneno afecta especialmente a niños y adultos mayores. Aunque en Brasil se registran miles de mordeduras anuales, solo un pequeño porcentaje son graves, y los casos mortales han sido pocos.