Muchos ciudadanos habrán notado que, apenas asumió Mario Bergara en la Intendencia de Montevideo, el color del logo de la comuna abandonó el verde claro de Carolina Cosse para reestrenarse con un azul eléctrico.
Este cambio de fachada institucional –que ya sucedió en la faceta digital de la intendencia– no está inspirado por un espíritu refundacional, según dicen desde la intendencia.
En una nota escrita enviada desde Comunicación de la comuna a El Observador, resaltan que "el logo se mantiene dando continuidad" y que lo que se modifica es el color principalmente por un criterio de "accesibilidad visual".
"El uso adecuado del color y el contraste es esencial para garantizar una lectura clara, especialmente para personas con discapacidades visuales. En este sentido, se da un paso importante hacia una identidad más inclusiva y accesible para todas y todos", indicaron.
En el Departamento de Comunicación –que dirige Natalia Acerenza– entienden que "los colores no son detalles menores: transmiten significados, generan percepciones y conectan con emociones colectivas."
20250616 Natalia Acerenza. Bergara presentó su gabinete para la Intendencia de Montevideo
Foto: Inés Guimaraens
Este cambio de color "responde a una acción comunicacional necesaria y pensada estratégicamente para acompañar y reforzar el inicio de una nueva etapa de gestión". Desde lo visual, afirman, se crea "una coherencia" entre el mensaje y la identidad del nuevo gobierno departamental.
La actual administración eligió este azul (el 300 C de Pantone) señalando que ya se encontraba dentro de la paleta de la intendencia, si bien no era el color institucional principal.
"El color busca una identidad visual más luminosa, vibrante y alineada con un Montevideo más limpio, más ágil y más disfrutable", dice el texto del Departamento de Comunicación que recoge los tres ejes que planteó Bergara durante la campaña.
"Toda esa energía que en cada palabra el nuevo intendente transmite sobre Montevideo, las personas que lo habitan y el disfrute del departamento queremos se vea reflejada en la identidad visual", continúa.
Este cambio de color "será progresivo, sin implicar costos extra para la administración" porque en la intendencia entienden que hay "prioridades".
"En una primera etapa, se aplicará en los entornos digitales, utilizando herramientas de diseño ya disponibles dentro de la propia estructura de la comuna", continuaron desde Comunicación de la IMM.
"En los soportes físicos, la transición será gradual", afirmaron. El hecho de que el diseño base sea el mismo habilita "una convivencia ordenada entre ambas versiones".
"A medida que se requiera reponer materiales, se irá incorporando el nuevo color, siempre con criterios de eficiencia y racionalidad presupuestaria", concluyeron.